ver que nada cambia aunque nada se detenga
de lo que está instalado sobre nosotros
y que nos enchiquera en los pequeños márgenes
que son también suyos
vivimos solo y solos
en minúsculos y reducidos espacios
(por vivir quiero decir ser)
nuestro error debe consistir en pensar
meditar
considerar
razonar
(naturalmente es el error de quienes se atreven a todo ello)
y sobre todo pretender decidir
(un imprudente error, el más peligroso;
es obvio que hay otro mayor y definitivo:
pretender actuar por nuestra cuenta
y conforme a nuestro pensamiento)
pero siempre están por encima los monstruos
(ahora más abominables y poderosos que nunca)
impidiendo
que decidamos
y que lo hagamos desde cada uno
y con muchos
¿qué margen nos dejan?
uno exclusivamente: consumir ciegamente sin saber
si más allá viviremos
(insisto: vivir es ser o no es más que inercia absurda)
lo demás, no nos engañemos, es decir amén
mal vivir
¿y las ideas?
presumimos tanto de ellas
¿quién no tiene ideas como éter flotando en derredor?
mientras no salgan de nuestras mentes
ni las traslademos
ni las fecundemos entre otros individuos
nos toleran
porque saben de sobra que las ideas se anulan en su propio redil
y no les crea riesgo
¿debemos respetar esas fronteras de alambre de espino?
me pregunto cada día si eso es la libertad de vivir
si la libertad (cuando hablo de libertad hablo de ser)
es vivir encerrados en nuestras mentes
o renunciar a lo que genera: eso llamado conciencia
elemento éste de no siempre clara existencia y aún más difícil explicación
solo nos espera la locura
los monstruos se frotarán las manos
una vez más
y el mercado
su dios de dioses bendecido
por la casta de las castas que ha vivido del cuento de su dios
cantará la felicidad de los imbéciles en su criminal insensatez
Lleno de significaciones... Vivir, compartir, mirar, todo es ser, pero ser en una dimensión ética, no meramente consumista, no meramente de dejarse ir por la pendiente hacia abajo, hacia la nada.
ResponderEliminarEs un desahogo, Ramón, no tiene más valor. Las circunstancias le están volviendo a uno rabioso. No dejan de caer hostias por todas partes. Se insulta a la ciudadanía cada día, se la maltrata, se habla en su nombre y se la traiciona, se la roba, se la miente, se la estafa, se la deja sin suelo bajo los pies (¿qué otra cosa es la venta de bienes públicos, de servicios, de prestaciones, la privatización a grandes velocidades?), se exime de impuestos y se otorga beneficios a la casta improductiva por excelencia llamada Iglesia, se deja en manos del Opus la influencia ideológica más trasnochada...Pero, ¿qué se han creído estos gestores inútiles que nos gobiernan? ¿Que el país es de ellos? ¿No es para amargarse? Y ¿a la gente le da lo mismo? ¿Vamos a reaccionar cuando todo sea tierra quemada?
ResponderEliminarGracias, disculpa.
Comprendo y comparto esta frustración y la injustia, pero para algo me habría de servir estas emociones a lo largo de mi infancia, juventud e incluso madurez, para que ya no me crea la vida. De momento no se me ocurre otra manera de evitar una úlcera de estómago, que hace mucha pupa y este cuerpo serrano todavía funciona, si lo hace, que sea en condiciones. Bss.
ResponderEliminarnuestro error es quere vivir y ser felices al mismo tiempo...eso no siempre esta disponible y he aqui nuestra ironía...
ResponderEliminarHombre, Emejota, qué maximalista. No creer en la vida suena demasiado extremo, ¿no crees? Debemos siempre matizar (no digo aquí en la red, sino dentro de nosotros) para no perder el norte, por muchas historias malas que se hayan tenido. Pero estoy de acuerdo que hay que evitar la úlcera y otras enfermedades derivadas de la segregación excesiva de bilis negra. ¿Por qué crees que muchos manteneos blogs, por ejemplo?
ResponderEliminarAris, ya sabes que nadar y guardar la ropa no da resultado a los humanos. No así a los clérigos y su cuerpo empresarial: toda su historia dedicados a preservar la doble jugada. Ahora entiendo lo de la exigencia del celibato, para dedicarse mejor, jaj.
ResponderEliminarYa en serio, creo que también es un problema conceptual. Aunque bastante moderno. Lo de la felicidad se ha exaltado y exultado, siendo como es un absoluto no es alcanzable, pero es uno de los grandes mitos de los tiempos modernos. Solo quebrado en los períodos de guerra en Occidente. Si se cree y se delega en los conceptos abstractos y absolutos la gente pierde la noción de vivir con los pies en el suelo. Nos planteamos objetivos difíciles cuando no imposibles de conseguir. Y perdemos la referencia de los valores que costaron siempre conseguir materializar.
Un abrazo.
¡Jo...! Veo que la visión panorámica en esencia es la misma que tengo últimamente. Que la rabia contenida pugna por salir. Pero tú sabes hacerlo con exquisitez, cualidad para la que no estoy dotada. Creo que estás en lo cierto en esa pregunta que lanzas al comentario de Ramón, sí se creen que el país es suyo, obviamente, lo monopolizan, lo dejan pudrir. Quizás es que sobra la clase media y hay que provocar, por medios más sutiles que el exterminio masivo en cámaras de gas o en guerras, su total desaparición. Huele a putrefacción, nos pudrimos y no nos olemos. Tampoco reaccionamos como cabría esperar...
ResponderEliminarGracias Mafalda, porque te siento solidaria de mis rabias. Pero dudo que las rabias sean exquisitas. En estado de rabia ¿se nubla la mente o se ve más claro? Tal vez son dos pasos complementarios, o que cohabitan. No había vivido de adulto nada igual. Este estado de incertidumbre del país, por una parte, y esta actitud confusa, contenida o ciega de la población, por otra, me descoloca. Es tal la injusticia y el estado de mierda que estamos descubriendo que nos cubría alrededor que uno se espanta.
ResponderEliminarPara remate: hoy leo que los estudiantes de Primaria van a la cola de Europa. Primaria es futuro, ¿no? Dime, entonces, qué coño de futuro y de hombres y mujeres de futuro van a habitar esta península.
Complejo, confuso, pero no difuso. Nunca hemos visto el fondo de la cuestión como ahora. ¡Si se quiere ver!, naturalmente. Como decía el poema y la canción...
"Estamos tocando el fondo, estamos tocando el fondo".
Pues si, estamos tocando el fondo o...lo hemos tocado.
ResponderEliminarEs una muy buena oportunidad de comenzar, si queda para un comienzo.
un abrazo fumigado por una agenda oculta.
Tula
Tula. Es más grave de lo que parece. Y todo tiene nombres y apellidos. Y nadie se libra de su parte de responsabilidad. Pro arriba, ARRIBA, están los verdaderos inductores de mal de la situación inmediata. Si los de abajo no pensamos en otro mundo, otra Tierra, otro sistema de hacer...no sé qué pasará.
ResponderEliminarCon la Enseñanza Primaria española a la cola de Europa NO TE CUENTO QUÉ FUTURO.
Quisiera trasladar optimismo, pero...