viernes, 28 de mayo de 2021
La mujer obscura
martes, 25 de mayo de 2021
Para morirse de risa o Saben aquel que diu...? (Presencia de Juan Muñoz en Oporto)
sábado, 22 de mayo de 2021
Cuando un abrazo es más auténtico y expresivo que las palabras
Tal vez esto nos falta en estos tiempos: acoger y ser acogidos.
Tal vez esto nos delata: que nos disociamos como especie humana, como si cualquiera de nosotros, o de nuestros hijos, no pudiera verse en algún momento en el lado opuesto al que estamos.
Tal vez esto nos vuelve miserables: no comprender al otro, ignorar su vida precaria, convertir al desdichado en enemigo.
Respecto a la manipulación de las imágenes y las barbaridades que se dicen por las llamadas redes sociales solo afirmar que es cosa de canallas. Maldito aquel que se preste a la perversidad. Sea individuo o partido político. Es el más canalla e ignorante que quepa en esta Tierra. Pero hace daño.
https://www.rtve.es/alacarta/videos/modo-digital/luna-voluntaria-cruz-roja-solo-di-abrazo/5909891/
viernes, 21 de mayo de 2021
Y ahora Francisco Brines
¿Quién dijo que llevamos una racha fatídica de desaparición de poetas? Y aunque así fuera, ¿no han quedado sus cuerpos y sus rostros entre las palabras que escribieron? ¿No sobreviven sus energías y sus emociones, sus quejas y sus disfrutes, sus extrañezas y sus descubrimientos? ¿No son sus poemas los verdaderos entes que respiraron por ellos, fecundaron por ellos, se alzaron y cayeron con ellos?
Francisco Brines, en La piedad del tiempo:
miércoles, 19 de mayo de 2021
Varado en un sueño que me llevaba lejos
martes, 18 de mayo de 2021
La obscenidad que cerca, maltrata y mata a los palestinos
Agamenón: Cuánta obscenidad en esto de Gaza.
El porquero: Y cuánta repugnancia por la complicidad y el silencio.
Agamenón: Al fin coincidimos en algo.
El porquero: Pero estemos o no de acuerdo entre usted y yo todo seguirá siendo obsceno y repugnante.
(Sin el permiso pertinente de Juan de Mairena)
Fotografía de Ashraf Abu Amrah para Reuters, tomada de dw.com
sábado, 15 de mayo de 2021
El adolescente que hablaba con los lares protectores
viernes, 14 de mayo de 2021
martes, 11 de mayo de 2021
Una carta inconclusa de la pompeyana Sabina a su apreciado Marco Tulio Obelio
domingo, 9 de mayo de 2021
Los libertos
jueves, 6 de mayo de 2021
Diálogo apócrifo de Don Quijote y Sancho Panza al pasar por Madrid
- ¿Pues no decía vuesa merced que de la pandemia íbamos a salir mejores?
- Lo dije, pero ahora tengo luengas dudas. A la vista está, mi fiel Sancho, que salimos más torpes y sin propósito de la enmienda. Y que volvemos a caer en las mismas desventuras que durante siglos nos han perjudicado.
- ¿Y no fue vuesa hidalguía la que defendió que los hombres debían ayudarse en el infortunio, plantar cara a los canallas y procurar la caridad y la justicia con los desdichados?
- Mi buen Sancho, también farfullé que los molinos eran gigantes, las aldeanas nada menos que princesas, las ventas no otra cosa sino castillos, y que la cadena de galeotes penados lo era de inocentes, o que los pellejos de vino tornábanse en otros gigantes, por no olvidar que la virgen que llevaban los disciplinantes en procesión era una dama tomada cautiva por malandrines y que la gobernación de una ínsula estaba al alcance de cualquier patán.
- Mas yo le advertí a tiempo de sus acaso bienintencionados errores, mi señor Alonso Quijano, debido a los cuales así nos fue en la desdicha, por ver lo que no era y confundir culos con témporas.
- No sé si hubo yerro por mi parte con bondadosa intención, pero si era yo el equivocado, ¿por qué me seguiste a pesar de todo, Sancho? Si cuanto sale de boca de cualquier orate, predica un avispado, proclama un negociante o un profeta os ofrece un edén os lo creéis, ¿cabe culpar de ello exclusivamente a cada uno de esos bellacos? ¿Por qué no usa la humanidad la razón a tiempo en lugar de sacrificarla a la mera palabrería? ¿Por qué no guiarse por el sentido común que proporciona la madurez de la vida? ¿Por qué se sentencia el futuro a los encantamientos vanos que antes que tarde se diluirán como el humo? ¿Es que las gentes han olvidado que nadie proporciona techo a cambio de nada, ni concede por gracia mantas para cubrirse, ni garantiza el plato diario de gabrieles, ni da un ápice de libertad si no le vendes al menos una porción de tu alma?
(Escultura de Don Quijote y Sancho Panza en Alcalá de Henares)
martes, 4 de mayo de 2021
El señalado
https://ehchiton.blogspot.com/2021/05/la-mujer-que-se-quedo-en-blanco.html
(Retrato de Lusha Nelson a Peter Lorre durante el rodaje de la película Crimen y castigo en 1935)
sábado, 1 de mayo de 2021
El día que Billy Bragg ondeó su guitarra
Puedes estar o no de acuerdo con los principios que defendió Billy Bragg, dice Max, pero no puedes negar la energía que derrochan algunas de sus canciones. Algunas remueven mis pensamientos vivos de juventud. Max, los pensamientos de juventud son pensamientos muertos, le replico agrio. ¿Vive acaso aquello que envejece en el baúl de nuestra memoria? Los cementerios, por ejemplo, son objeto de memoria, pero todo ahí es estático. Solo el símbolo adquiere un papel vivificador, pero ¿a quién resucita el símbolo? Vaya, insiste un Max que desconozco hoy. Estás más tajante tú que yo. ¿No se suponía que tú eras el sensible y amable y yo quien viene siempre a traer problemas? Pues sí, estaba allí cuando Bragg enardeció al público con algunas canciones históricas, entre otras más de su cosecha. Entonces vivíamos más que nada de enardecernos. Una de las manifestaciones de la ilusión, del cultivo de mundos ideales, que llevaba su carga honesta y sincera. ¿No nos guiaban valores en los que hoy pocos se reconocen? No me arrepiento de ello, y sé que aunque estés desabrido conmigo tú tampoco te arrepientes. Hoy todo lo del pasado resuena como relato épico, Max. La resistencia y el esfuerzo por mejorar la existencia no prende como en otro tiempo entre la gente. Se supone que yo soy el eterno escéptico, dice Max burlón. Y no he venido a discutir con amarguras. Por eso te he traído el disco del recital de Billy Bragg. Siempre te ha gustado el ritmo irlandés, con esos ecos celtas que tanto os enajena a los individuos irredentos. Y aunque la letra te haga sonreír con ironía y desánimo sé que la entenderás. Porque a ti también te gusta volar a los tiempos en que todo parecía tener un justo sentido. Max no me deja opción y abro una botella de un Valbuena del 72 que guardaba por guardar. ¿Sabes, Max? Este vino tiene cuatro o cinco variedades de uva en sus entrañas. Las mezclas enriquecen.