La crónica de acontecimientos que vive el país (cuánto me gustaba aquel título de los samizdat clandestinos de la Europa del Este bajo las dictaduras) remueve el sentido de las palabras, de tal modo que no sabes bien si dicen verdad o mentira, algo que parece que no importa ya mucho porque tanto con la verdad como con la mentira, o con la verdad de la mentira o con la mentira de la verdad, la confusión está servida. Con la mejor intención, o con la intención traviesa, allá como lo vea cada cual, pero con ironía, y sin pretender hacer daño a nadie (el que se pica ajos come se dice en mi pueblo pueblerino) se exponen a continuación algunas palabras. Habrá muchas más en danza y el vocabulario se puede ampliar. Se exponen en bilingüe, por exigencia del guión de esta temporada de la que estamos hastiados, para mejor orientación del lector. Pido disculpas por no ir la nomenclatura en orden alfabético; tal vez no sea tan cómodo ni ortodoxo pero es que las ocurrencias brotan así, ácratas y sin pelos en su manar.
Disfraz. Disfressa. Vestimenta con la que un personaje de hoy quiere ser un personaje del pasado. Estos días unos adoptan el ropaje de 1936, otros de 1917, bastantes de 1714, las masas urbanas de franquismo o antifranquismo y cierta gente de los pueblos del interior catalán de carlistas decimonónicos.
Mediador. Mediador. Personaje de búsqueda difícil y hallazgo acaso imposible cuya presencia se implora por aquellos que han puesto en marcha la caminata al abismo. Los hay que se ofrecen como partido mediador, otros como club de fútbol azulgrana mediador, otros como sindicato de clase mediador, etcétera. Visto que las autoridades europeas no pueden estar por la labor, la acendrada y fervorosa tradición montserratina intenta que cierta entidad dada a nadar y guardar la ropa se implique como intermediaria de no sé sabe qué. A esta fecha nadie parece confirmarlo, pero solamente pensar que la Sacra Institución juegue un rol decisivo en la política española espanta. Que la Iglesia tomara carta de naturaleza cuasi constitucional sería visto como una afrenta al orden vigente. Por otra parte, tal como ha sido su comportamiento histórico en esta tierra elegida del Señor, pediría algo (mucho) a cambio y dejaría con el culo al aire al Estado español y al Estado del sol naciente del Mediterráneo. Naturalmente, cabe otra interpretación más pragmática, y es la que decía a veces mi padre: hay que tener amigos hasta en el infierno.
Represión. Repressió. Actividad, práctica y efecto habitual de las fuerzas del orden, llámense Policía, Mossos, Somatenes o Migueletes, reconocida por la Constitución, ante el ejercicio de resistencia o de bloqueo de la grey humana en circunstancias que no agradan al padre mayor de la cofradía. Dicho ejercicio cabe esperarlo y no debería coger por sorpresa a nadie. Matices a definir aparte serían los excesos, los defectos o la pasividad que mostrasen los cuerpos encargados para tal fin. No hace falta ser un lince para comprobar que es un elemento con el que se suele contar por parte de los que protestan para enfervorizar a sus seguidores, abrir o ampliar el martirologio y tener cancha en titulares en inglés, francés o polaco.
Maniqueísmo.Maniqueisme. Espacio que con frecuencia sustituye a la política clara y representativa.
Equivocado. Equivocat. El otro, siempre el otro.
Referéndum. Referèndum. Véase 1. entelequia. 2. algarada.
Algarada. Aldarull. Pretensión de capacidad expresiva en la calle de una minoría, más o menos numerosa, que, con ciega presuntuosidad, dice hablar en nombre de todos.
Político. Polític. Ser, ente o animal fantástico de este mundo que no sabe por qué andurriales se mueve, a causa de lo cual acaba por no ser de este mundo.
Político listo. Polític llest. 1. Personaje que presume de tener carrera. 2. Oportunista. 3. Simplemente listillo.
Político torpe. Polític maldestre. La torpeza suele ser el sustrato real del político listo que, muchas veces, no se advierte de primeras.
Desastre. Desastre. Término antiguo -recuérdese el desastre de Cuba, el desastre de Annual, el desastre de la Guerra Civil- que vuelve a estar de moda estos días en boca del ciudadano común sin que sepa muy bien de qué habla, ya que prácticamente no existen habitantes que hayan conocido el último de los desastres que merezcan tal nombre. No obstante, su pronunciación conlleva una acentuación de la sílaba llana que se desliza con parsimonia, temor y misterio. Este vocablo, a medida que se emite, invita a imaginar una materialización del concepto. Ahí cada cual es muy libre de poner imágenes, nombres y personas, pero de momento el anticipo se denomina simplemente caída del Ibex 35, con especial resalte de la banca del Nordeste, o desubicación de sedes de empresas importantes.
República. República. Instrumento de gobierno legítimo y valioso que, en las escasas ocasiones que se constituyó en forma de gobierno del Estado, fue aceptado a regañadientes por las clases pudientes y reaccionarias del país y tuvo poca vida. Visto con qué escasa fiabilidad se invoca desde el Nordeste la Declaración de una nueva República sospecho que tanto el concepto como el término queden devaluados para el resto de nuestros días.
Gobierno.Govern de l'Estat. Institución ejecutiva caracterizada por la impavidez y la improvisación.
Govern. Govern. Corte de aprendices de brujo con cierto recorrido que están convencidos de que viven sus días de gloria.
Independencia. Independència. Paso que se da de depender de unos a depender de otros. Es una costumbre arraigada en la sociedad. Los hijos se separan de los padres para depender de una nueva familia. Hay obreros que se van de la fábrica para ser autopatronos y depender más de Hacienda. Hay quien deja un novio o una novia para someterse a un yugo superior que puede pedirle, en caso de desentendimiento, una compensación mayor. Hay quien se va de un país porque se siente esclavizado en él y acaba agachando la cerviz ante una tiranía más ingrata. Cualquiera de estos pasos suele implicar más cargas onerosas y pagar el precio de un agotamiento físico que, en bastantes casos, produce trastornos de comportamiento.
Hipocresía. Hipocresia. Moral del ciudadano medio, apenas reconocida por el mismo y heredada a su vez de los ciudadanos superiores, que se supone que siempre han sido modelos y ejemplos de perfección. De perfeccionar la hipocresía, se entiende.
Maniqueísmo. Maniqueisme. Forma superior de la hipocresía llevada a sus últimas consecuencias. No es maniqueo quien quiere sino quien puede. Se ejercita desde instancias de poder principalmente y cuanto más poder e influencia se tiene más elevada es la cuota maniquea. Esta temporada está en alza de cotización entre partidos e instituciones que se han puesto a jugar a la ruleta rusa con la sociedad.
Enfrentamiento. Enfrontament. Fantasma siniestro, secular y obcecado que recorre España. Suele aparecer y desaparecer, pues nunca muere sino que permanece dormido cuando la ciudadanía lo ignora. Cuando un sector de ésta arrastra al todo
Clamor. Clam. Voz de fondo legítima que se ignora para ser sustituida por el ruido al toque del padre prefecto.
Ruido. Soroll. Fracaso de la música. Sin embargo, el ruido es hijo de otra música, la llamada música celestial que emana de las ideologías retrógradas, los castillos en el aire y la grandilocuencia de los que se consideran portadores de valores antiguos y eternos.
Desprecio. Menyspreu. Actitud nefasta que define a quien la manifiesta. Suelen operar con desprecio aquellos cuya seña de identidad misérrima no les permite ni conocerse bien a sí mismos y tratan de compensar este defecto ignorando al otro y tratándolo con descalificaciones banales e incluso insultantes.
Desgracia. Desgràcia. Temporada de otoño agudizada y esperemos que pasajera donde el común de los mortales empieza a hartarse y cuyo desenlace imprevisible nos tiene a todos en vilo.
Sedición. Sedició. Término que aparece frecuentemente en los libros de historia antigua, medieval, moderna y contemporánea como prolegómeno de la rebelión. Cuando parecía que tal alzamiento permanecía encerrado en las páginas de los aburridos libros de relatos de Historia he aquí que algunos personajes cultos lo aplican sin saber muy bien a dónde les puede conducir tamaña osadía.
Rebelión. Rebel.lió. Palabra aún no pronunciada, al menos en su sentido jurídico, pero que se oculta tras una determinada ficha de dominó que en cualquier momento puede hacer caer a todas las demás.
Obcecación. Obcecació. Estado de ánimo enfermizo persistente en el individuo o en el grupo de individuos que no solo pone en peligro su propia salud sino la de muchas otras personas ajenas a las dosis que se meten aquellos.
Odio. Odi. Hijo del engreimiento, hermano de la soberbia y esclavo de la ira. A veces dentro de la familia andan también procurándolo la avaricia y en numerosos casos la envidia. Suele ser un monstruo larvado que acompaña día tras día a muchos individuos y que ocasionalmente toca las trompetas del Apocalipsis para echar a perder las relaciones entre hombres, cuando no las vidas. La única manera de suavizarlo que se conoce es tomarse unos vinos entre
Épica. Êpica. Relato de los hechos que no ocurrieron jamás.
Héroe. Heroi. Personaje con frecuencia asesino que se cita con elogios en los manuales de Historia.
Diálogo. Diàleg. Extraña e ingenua invocación de los que no se mojan y de los que no tienen intención de cambiar sus puntos de vista. Dos opositores políticos se encontraron en lo alto de una montaña dispuestos a dialogar, dijeron. Primero se aseguraron de que no tropezarían con una roca, como afirmando la seguridad en sí mismos y no en la montaña Luego volvieron la cabeza mientras farfullaban palabras y hacían gestos que ninguno de los dos podía escuchar ni ver. Al final, se volvieron, se saludaron con cortesía y descendieron por las laderas mientras los suyos les aplaudían.
Obrero. Obrer. Ser misterioso del pasado y que, de sobrevivir, jamás se cita en los acontecimientos del presente.
Clase. Classe. Perdón, este vocablo ya no aparece en la batalla ruidosa de las palabras de cada día.
Gente. Gent. Comodín que igual vale para un roto que para un descosido. Término difuso que abunda en la boca de los políticos de todo el espectro ideológico, al que se alude para atraer o para rechazar, para contarles cuentos o para pedirles el voto, para venderles un perro o una boda, y en cuyo nombre todos justifican sus palabras y actos, unos con sus medidas ejecutivas, otros con sus discursos hueros. La gente está con nosotros, dijo con énfasis el líder del partido H. La gente nos seguirá hasta el fin, clamó con voz más elevada el dirigente del político I. Hay que hacer las cosas bien por la gente, afirmó el ínclito gobernante. Hablad, gente, hablad, bramó el opositor. Gente, invertid vuestros ahorros en la Gran Banca de la Gente. Pero en la vida cotidiana la gente real no aparecía por ninguna parte.
Izquierda. Esquerra. Opuesto, contrario, enemigo o complementario de Derecha. Dicen que el nombre viene del Jeu de Paume de 1789, donde quienes estaban en alza en una parte del local eran respondidos críticamente por los que estaban situados a la izquierda, pero eso puede ser una invención. En nuestra historia contemporánea se llamaba así un sector de la política supuestamente honesto y que defendía ciertos valores idealistas que jamás lograron plasmarse en el Poder. Hoy sumido en la indefinición. O bien sus comportamientos la definen de tal modo que acaso debería cambiarse el nombre.
Mass media. Mass media. Horno donde se amasa harina de muchos otros costales sin que salga un pan comestible. No conviene disentir en público de los mass media pues en estos tiempos juegan el papel de Verdad Revelada, aunque cotidianamente nos estén revelando lo que ya sabemos. Los políticos y los económicos los utilizan de diversas maneras. Incluidos el Gobierno y el Govern.
Martirologio. Martirologi. Como su nombre indica, jardín donde crecen jugosos los crisantemos.
Hastío. Fastig. Estado en que la fiesta se vuelve anodina, repetitiva, monótona y monotemática, y cada vez menos la quieren. Mejor así.
(Imagen de William Blake)