le devora por dentro esa sensación de que un acto de la obra de teatro ha concluido, con un mayoritario aplauso; que los espectadores, aunque ellos se han creído actores, han respirado con alivio; no sabe muy bien de qué se sienten aliviados; desde luego, opina, no de su estupidez; quedan bastantes actos en este drama, ¿o es comedia, o es entremés?, algunos ya con guión y otros apenas pergeñados; rápidamente se ha hecho el silencio durante estos días, se intuyen las maniobras orquestales en la oscuridad, se percibe cierto fragor de los acuerdos y ordenamientos por encima de nuestras cabezas; eso le da en pensar y le deja mal gusto la situación anodina e indefensa que parece rodearnos; por si fuera poco, dice, salta a escena como una fiera indomable la gran señal; dice que escucha -¿o solo lo imagina?- al público comentar: aprovechemos la paga extra, por si es la última por un tiempo; la gran señal ilumina calles, agita las entradas y salidas de comercios, pone rostros postizos; no necesitaría un calendario, me ha dicho mientras abría su tercera trapense fuertemente malteada; con observar las conductas tribales sabes con una aproximación casi al cien por cien en qué momento del año te encuentras; ¿y si la recesión, la depresión o el hundimiento, como se la tenga que llamar, apaga la gran señal precisamente en estas fechas?, le replico con ironía; ha contenido con cierto esfuerzo la palabrota, se ha quedado ido y me ha ofrecido un sonoro eructo.
(Fotografía de Francesc Català-Roca)
Yo no hubiera contenido la sonora palabrota, pero el eructo sonoroso no está nada mal.
ResponderEliminarMe pregunto quién nos gobiernará: ¿merkel y sus mercados? ¿las oligarquías nacionales? ¿la mafia del dinero?
No todos tenemos "pagas extra", desde luego no es mi caso desde hace más de un cuarto de siglo. En cuanto a lo demás, pues bien pensado, aunque ir de lo cómodo a lo nefasto resulta obviamente negativo, lo que está claro es que: 1 - Sobramos demasiados, la mayoría somos como "cromos repetidos" aunque nos creamos tan especiales y personales: Mi persona en primera linea de desfile.
ResponderEliminar2 - Hacer esfuerzos estimula la imaginación y la inteligencia, vivíamos en una sociedad asquerosamente acomodada. (Me refiero a la occidental).
3 - Pese al dolor, que también se encuentra gratuitamente por cualquier resquicio de vida que uno asome las narices, puesto que la propia vida lo lleva implícito, "se moverá la barca" y eso resultará peligroso, pero desde luego no aburrido.
Vaya, cómo me gusta hacer de abogado del diablo ¿Se nota mucho? Y a la política, pchss, siempre estuvo en manos de la economía, solo que ahora parece práctico darle una difusión extraordinaria con unos medios de los que antes no se disponía.
Ah y - 4 - Los actuales medios de comunicación no tienen corazón ni emociones, solo bolsillo, eso sí, la velocidad incrementa de forma proporcional en que el valor de las noticias disminuye.
Así piensa este peazo pedrusco. Todo lo que sube ha de bajar necesariamente para los que nos encontramos sujetos a la ley de la gravitación.
Evidente resulta que ya lo perdí todo, aunque nada me falte. Bs.
Aha, me olvidaba decirte que esa imagen nos retrocede a mediados del siglo pasado y te paso te regalo uno de mis "emblemas musicales" http://youtu.be/0bJE-eB3Vgs
ResponderEliminarCasilda, probablemente una mezcla de todo, un monstruo híbrido, una supranacional...me obsesiona a qué precio se constituirán por encima de nuestras cabezas de hormigas ¿impotentes?
ResponderEliminarEmejota, me parece muy bien que hagas de abogado del diablo. Yo mismo lo practico y me enveneno en mis devaneos fantasiosos. Lo que más me intriga es el tránsito. ¿Tú crees que las sociedades occidentales, tan acostumbradas a esas cómodas y engreídas seguridades que se han vivido, aceptarán el adelgazamiento? No, no quiero ir más allá. Tiempos complejos, y otros dirían que apasionantes. Uf.
ResponderEliminarEJota. Qué olvidada tenemos a Joan Baez. Las modas posteriores (y las ventas) han arrasado y hecho olvidar aquellos iconos de no hace tantos años. Pero lo expresivo, lo que tiene densidad y significado está ahí, para que nos hable de nuevo. Una preciosidad de canción de las tres heridas. Gracias.
ResponderEliminarEstan tan seguros del éxito de su nuevo orden mundial implementado implacablemente desde 1970 que ya no les importa que nos enteremos de lo que hacen. Demasiada información no es necesariamente algo bueno si no se sabe que hacer con ella. Lo peor es que los que estan "abajo" y protestan son los primeros en hacer el juego a la corrupción del sistema a la mínima oportunidad. El estado del bienestar es una droga, un invento para tenernos a todos embobados y aletargados. Ya va siendo hora de que despertemos, aunque sea a tortazos.
ResponderEliminarMercedes. De lo que hacen nos enteraremos antes o después. Ellos tienen muy claro que no tienen que pedir permiso, aun sabiendo que lo de mantener las formas "democráticas" se lleva por eso de que sirve para el control y el engaño. Lo que más me intriga es cómo lo hacen.
ResponderEliminar¿Los de abajo? Pues inconsecuentes y vendidos como siempre, y de querer estar a las duras pero no a las maduras (o vice) La cuestión es que lo del estado de bienestar habría que revisarlo para no caer en el estado de malestar permanente. Yo creo en los logros sociales, laborales y comunitarios que algunas zonas del planeta han logrado a lo largo de décadas, con esfuerzo, lucha y llanto. No es bagatela. Pero eso no cuadra bien con un statu quo en que la propiedad privada de una minoría que, por otro lado ha despilfarrado (como se ha despilfarrado también por abajo, siguiendo las pautas y tentaciones del mercado), quiere ser más intocable que nunca.
Si vamos a una chinización y no solo mercantil, estamos apañados. Supongo que los tortazos llegarán, otra cosa es si despertarán al personal o lo aplanarán para otra temporada. Hay puntos de vista.