Somos los nietos de los obreros que nunca pudisteis matar. Me estremece la frase. Que setenta y cinco años después de los hechos de referencia sea pronunciada es para dedicar un punto de meditación. Los nietos de los obreros que no pudieron matar claman en un pueblo de la provincia de Ávila. El alcalde del PP ha desalojado los restos de los asesinados en 1936 para meterlos en la fosa común. El gesto no le honra, ni a él ni a sus seguidores del lugar ni al partido que le respalda. Que el gesto vaya -por muy legal que sea según los del partido llamado Popular, aunque ya sabemos que la ley se hace y deshace conforme a intereses en juego- contra cualquier principio de reconciliación y de ritual humanitario que habría que respetar les trae al pairo. A mi no. Que el gesto saque a relucir el talante patrimonial y chulesco de que quienes se creen con poder omnímodo y heredado directamente de Dios, y no les importe a muchos vecinos de su cuerda... A mí sí. ¿Y quién dice que las dos Españas no existen? Porque se han enfrentado con acritud verbal y si no interviene la Guardia Civil hubieran ido a más. Puede que muchos quiten importancia a sucesos así. Y que digan que es un enfrentamiento de nostálgicos no me basta. Pues aun suponiendo que lo fueran, a unos les asiste la fuerza bruta -del control de la administración del pueblo y de su capacidad energúmena- y a otros simplemente el valor de la razón. Unamuno dijo de la insurrección de Franco aquello de
venceréis pero no convenceréis. La derecha brutal no convenció nunca y sigue sin convencer ahora. Y menos todavía si se mantienen en sus trece.
Reflexión hasta en lo que parece insignificante, por favor.
(Imagen:
Duelo a garrotazos, de
Francisco de Goya, en fotografía de Laurent)
El precio del inmovilismo. Todo tiene su precio, en una moneda u otra, la clave es el discernimiento, pero parece que es un manjar reservado a los más....."ponga cada cual su adjetivo"...
ResponderEliminarLo malo de esto es que nuestra sociedad todavía no se encuentra lo suficientemente evolucionada y claro, pese a una minoría que lucha denodadamente por su "elevación" (por decir algo)..... parece que todavía no se cuenta con un número suficiente, y recordemos, vivimos en una "democracia", donde lo que prima es el número, la cantidad, etc. Beso.
Somos a memoria que temos e a responsabilidade que asumimos.
ResponderEliminarSem memoria nao existimos...
Sem responsabilidade tal vez nao mereçamos existir.
Saramago
El gesto no les honra y lo mas duro es comprobar que les trae al pairo porque la conciencia la tienen "limpia"?????
¿Reconciliación? Nuestra guerra puso de relieve la lucha de clases en todo su auge. 75 años después el conflicto no ha sido resuelto. Si la segunda gran gerra empezó por estos lares, ¿qué esperamos? Por muchas estratagemas que se inventen el conflicto sigue ahí y los muertos que emergen constantemente dan fe de ello.
ResponderEliminarReflexionar siempre, por supuesto!
Dos no se ponen de acuerdo, si uno no quiere.
ResponderEliminarDos no se pelean, si uno no quiere.
En ambas frases (referidas a dos mismos sujetos)el sujeto principal suele ser diferente.
Por desgracia, mucho me temo que este angustioso tema solo se podrá solventar en los Tribunales Internacionales de Crímenes contra la Humanidad. Aquí, imposible. Sigue la mentalidad del vencedor (permitida por un gobierno cobarde que no ha sabido hacer una ley justa) por muchos años que pasen. Mira si han pasado años desde la "Reconquista" y todavía estamos hablando de ella, así que...
Saludos, y un abrazo.
Emejota. Claro, la sociedad no evoluciona en todo al unísono. Muchos no ven no quieren ver algunos temas. Los suyos estuvieron adscritos a viejas mentalidades y muchos descendientes de la sociedad rural y no solo rural (es increíble la mentalidad reaccionaria que tienen muchos trabajadores de nuestras ciudades y cinturones presuntamente "rojos") son llevados por la incultura y la falta de análisis. Simplemente, no quieren pensar.
ResponderEliminarBalbi, siempre Saramago tan clarividente. Gracias por la cita.
ResponderEliminarLes da igual, como dices tú. Lo de la conciencia lo ignoran, lo de la responsabilidad les resbala, lo de la visión la desconocen. Mi opinión es que en los últimos años ha crecido un nacionalismo centralista, en parte como reacción y emulación de los periféricos (flaco favor el que ETA nos ha hecho durante estas últimas décadas) que se ha desarrollado en todas las comunidades autónoma españolas, que en su afán de identidad simplona retornan a los símbolos recalcitrantes y elementales. Como si todo fuera cuestión de la camiseta de la seleccíón, de la banderita española o el toro de osborne. Triste base icónica camino de ¿un nuevo fascismo? Porque a eso hay que añadir los argumentos versión COPE o Intereconomía, ABC o La Razón. No tienen más ideología que las voces de sus amos. Triste. Preocupante.
Ata. Aterra pensar que la historia se repita en las mismas coordinadas y bajo análogas características. Naturalmente, los muertos son la demostración in situ (nunca mejor dicho) Habría que decirles como en aquella acusación a Don Juan: ¡los muertos que vos matasteis gozan de buena salud! Por eso algunos franquistas vergonzantes no pueen soportar cualquier acción de recuperar la memoria. Le pone en evidencia.
ResponderEliminarCarlos, es que es relativo. No querer y contenerse cuando a uno le provocan por activa, por pasiva y contra el muro...Aquella versión laica y bienpensante de la parábola cristiana: poner la otra mejilla si te dan en una era impensable cuando la vil sublevación de 1936. Y ahora, lo que piden los franquistas redivivos es que los demás nos callemos y no recordemos. Eso es poner ahora la otra mejilla. Qué bien, qué larga mano la de los católicos fervientes.
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