El niño se pone de puntillas.
Mira qué alto soy, dice.
¿Lo seré más?
Lo serás, le responde el poeta.
Pero más importante que llegar alto es llegar lejos.
¿Cuánto de lejos? ¿A otra ciudad?
¿A otro país?
¿A otro continente?
Si sabes tomar la dirección adecuada
llegarás al mejor destino.
¿Cuál es ese destino?,
y el niño está perplejo.
Aquel que permite preguntas inteligentes
y ofrece respuestas oportunas .
Allí donde aprenderás a conocerte.
¿Y dónde está? ¿Hay que andar mucho?
Sí y no.
Está dentro de ti
y la caminata te llevará toda tu vida, apostilla el poeta.
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El camino sólo se hace a medida que se van dando pasos. Unas preguntas infantiles que no son tan inocentes como uno imagina.
ResponderEliminarUn abrazo
Siempre nos decían aquello de qué ocurrente es este niño,, cuando preguntábamos algo que no gustaba a los mayores, y sorteaban de esa manera para no responder.
EliminarEsto es una buena educación, añadamos además que para llegar lejos se requiere esfuerzo.
ResponderEliminarLa experiencia del camino irá dando respuestas y nuevos motivos para preguntar.
Salud
Se requiere esfuerzo pero también capacidad de proporcionar el medio para lograrlo por parte de las sociedades y sus Estados. La paradoja suele ser que donde hay posibilidades algunos no las aprovechan. Y en multitud de lugares del mundo no tienen posibilidad de sacar beneficio del esfuerzo porque simplemente no hay recursos.
EliminarDe momento el niño pregunta y escucha con respeto las respuestas.
ResponderEliminarYa es un algo.
Salut
Por supuesto. El método es elemental.
EliminarEsta es una de esas imágenes que dice más que mil palabras...
ResponderEliminarSaludos cordiales
Así es. ¿Cuántas veces hay que ponerse a lo largo de la vida de puntillas?
EliminarY no es seguro que alcance su meta.
ResponderEliminarCada cual tiene que intentarlo. ¿Quién tiene seguridad total?
EliminarTras la caminata habita la esperanza y espera el conocimiento. largo es el camino a recorrer y no garantiza que en niño crezca, si en estatura, pero no en conocimiento.
ResponderEliminarSaludos.
No garantiza, por lo que se puede ver en el entorno, y no pintan fáciles los tiempos.
EliminarEl conocimiento y el pensamiento crítico, no está muy lejos, solo hay que tener interés en buscarlos.
ResponderEliminarSaludos
Interés, que no siempre es innato o al menos no siempre se sabe ordenar y dotar de un sistema que proporcione conocimiento. Quién sabe si un buen maestro ayuda.
EliminarAlgunos nunca dejamos de caminar.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Yo creo que nadie, pero hay distintos ritmos, diferentes pasos, ¿no?
EliminarEl niño tiene suerte porque de momento acierta en el objetivo de sus preguntas al menos por lo wue se desprende de las respuestss
ResponderEliminarO sea, que se lo pone a huevo al poeta, en este caso.
EliminarNunca es tarde para crecer, para llegar más alto.
ResponderEliminarHay un crecimiento interior que puede ser más elevado que el simplemente alto, siempre tan discutible este...
EliminarEs muy larga la caminata para conocernos. Confieso que algunas veces me agota y me dan ganas de quedarme al lado del camino. E incluso en ese gesto, sigo conociéndome, reconociéndome. Tal vez el secreto sea no sólo aprender a conocernos, sino también a querernos.
ResponderEliminarBesos
En efecto, en cualquier gesto se conoce y/o reconoce el individuo. Se descubre o se ratifica. Corrige o repite el error. Pero nos damos cuenta. Y mientras transcurre la caminata y, por lo tanto, el tiempo.
EliminarFáckel:
ResponderEliminarsabias palabras, tras las cuales, el niño se puso a jugar con sus cosas tranquilamente. Eso de caminar hacia dentro no sabía muy bien cómo hacerlo...
Salu2.
Acaso lo haga instintivamente, como lo hicimos los demás.
EliminarUn camino que debemos emprender y acabar en soledad... y del que no siempre se vuelve con algo entre las manos... así es.
ResponderEliminarEn soledad. No es siempre una soledad asumida buenamente pero hay que aceptarla irremediablemente.
EliminarY le va quedando el sedimento de las respuestas...
ResponderEliminarCreo que con la edad se agudiza la introspección, el conocimiento, la serenidad y me atrevo a decir que la sabiduría.
Un abrazo Fackel
Yo también lo creo, Ángela. Sobre los cuatro factores que señalas se podría discutir algo, porque no todos ellos se manifiestan al unísono.
EliminarSi hubiesemos pensado como el poeta le contesta al niño, ya hubiésemos llegado a un mundo diferente. Qué ineptos somos!
ResponderEliminarHay niños que supieron escuchar al poeta -no fue mi caso- y llegaron aun mundo diferente en plano individual, pero en el sentido que tú le das...misión improbable (o acaso imposible, por lo que se ve)
EliminarTodos temos um percurso...há quem viva depressa demais, há quem fique preso no passado...o importante é saber escutar....
ResponderEliminarInteressante como sempre....
Beijos e abraços
Marta
Y no osiempre saber escuchar garantiza una evolución bien aprovechada. Obrigado.
EliminarEfectivamente, la caminata le durará lo que le dure la vida. Precioso y aleccionador poema. Abrazos.
ResponderEliminarComo nos va llevando a todos, aunque no sepamos muy bien para qué. Solo para sobrevivir, supongo, y no es poco. Y si es grato el paseo y llena, mejor. Salud, Mayte.
EliminarSabias palabras, sabios consejos los del poeta especialmente en aquello de: “Pero más importante que llegar alto es llegar lejos.”
ResponderEliminarEn cierto modo me recuerda, salvando alguna que otra distancia, a aquella famosa cita de Baudelaire: “Hay que ser sublime sin interrupción”.
Y lo de llegar lejos también hay que matizarlo. No se trata de cuestión de distancia, aunque en cierto modo...La cita de Baudelaire sí que exige matices y traducción, pero dejémosla a la libre reflexión. Saludo, José.
EliminarLe dijeron a un hombre exitoso profesionalmente, en su vida personal no tengo idea, "Qué suerte has tenido, la vida te ha tratado muy bien"; y él respondió, "¿La vida?, para nada, todo lo que tengo es gracias a mi esfuerzo y constancia, nada me ha venido gratis, ni solo".
ResponderEliminarPor supuesto, el esfuerzo es garantía de supervivencia, de progresar o incluso de eso que se llama triunfar (peligroso término) No obstante, insisto siempre en que si no se vive en una sociedad que procura medios de avance a sus miembros el esfuerzo no cunde. Ejemplos sobran a millones, pero nos llevaría a un largo y preciso debate.
EliminarNosce te ipsum. "El lentíssim art de conèixer-te a tu mateix, i que dura tota la vida", que deia Montserrat Roig.
ResponderEliminarRoig apostillaba lo que se dice que era lema del templo aquel de Delfos. Y que al estar en Delfos no era en latín sino γνωθι σεαυτόν, pero lo heredaron los romanos. En efecto, el conocerse dura toda la vida, y el conocer siempre es búsqueda. ¿Moriremos habiendo aprendido algo?
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