"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





viernes, 6 de diciembre de 2013




...y nadie, nadie citaba a infinitos hombres y mujeres de todas las edades que contribuyeron a terminar con aquella barbarie...muchos, muchísimos de ellos acabaron con menos suerte que el hombre... 



8 comentarios:

  1. Es cierto, las revoluciones no las hacen individuos en soledad, pero a veces hay quienes se transforman en banderas, indispensables para que los demás no pierdan el rumbo ni el aliento.
    Un abrazo

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    1. Mi opinión es que un líder o los líderes son piezas del engranaje...o claves de dovelas...y de cuya clarividencia pueda depender el éxito de un proyecto...pero es el todo colectivo y el todo plural lo que genera las posibilidades de cambio...y las coyunturas de un país y las internacionales...y los cambios de mentalidad o de conciencia dentro de los grupos sociales...en fin que creo que hay que ver todo en su amplitud y en la encardinación de los elementos, algo que no siempre se produce por casualidad ni en plazos cortos...con fases más resistentes y otras más violentas...

      Si el nivel de responsabilidad y de conciencia y de compromiso de cada ciudadano fuera más elevado los aparatos y los líderes serían menos decisivos y más controlados (que ésta es otra) Pero los sociedades son complejas y tienen en su seno intereses enfrentados y por ello se hallan divididas (a veces estúpidamente divididas) Lo de Suráfrica fue de órdago opresor, blancos minoritarios sujetando y explotando durante largo tiempo al negro productor, esclavo, consumidor penoso...En fin.

      Alegría de saber de ti de nuevo, un abrazo.

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  2. Puño bien alto por ellos, por los que defendieron y defienden libertad y derechos.
    Esos que si no seguimos defendiendo de nada servirán tantas y tantas vidas humanas.

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    1. No sé si el puño en alto goza de buena salud en estos tiempos, pero los motivos por los que históricamente se ha alzado siguen existiendo, no menos lacerantes, y tal como van las cosas en esta finca privada en la que vivimos sospecho que va a tener de nuevo un sentido. Que gente tan procaz como quienes nos dirigen, esos innombrables manchados de corrupción, se permitan hablar de los valores de Mandela suena a obsceno. Gracias por pasarte, Isabel.

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    2. Gracias, Sonia, demasiada obscenidad, sí.

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  3. La vida es anónima. Ya sabemos (o deberíamos saber) que la lucha está llena de nombres olvidados o desconocidos. Lo importante es saber que existen, que sin ellos ni nuestra alegría ni nuestro dolor tienen sentido. Diferenciar entre queja y justicia.

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    1. Contundente, Enric. Diferenciar entre queja y exigencia, que pueden ir unidas, pero que hay que ejercitar. Yo sé que existen, por eso me duele que se eleve a los altares a un personaje, se le convierta en símbolo y nos olvidemos de TODOS cuantos han sufrido en su anonimato. Por ellos. Para que el sistema no entierre con Mandela la queja y la exigencia, y sobre todo el ansia universal de justicia.

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