Una vez pregunté al poeta paseante:
¿hacia dónde diriges la vista cuando escribes,
a lo que has perdido o hacia lo que buscas?
Me respondió: yo no miro nunca al horizonte
y doy la espalda a lo que hubo antes.
Pero si no sabes a dónde vas
ni te interesa el recuerdo, me indigné,
¿sobre qué puedes hablar en tus poemas?
El poeta paseante rio
contemplándome con mirada aviesa.
Mis poemas son el instante volátil, proclamó
ufano y prominente.
Solo sé de la fugacidad y de la posesión temblorosa.
Cualquier otro interés sobre la poesía
sería una banalidad para mí.
Le dejé registrando el viento del Este
sobre su pedestal de carne flaca,
despreciando mi presencia.
La cara del instante es lo que escribe el poeta, no pasado, ni futuro, solo el instante presente, para informar de nuestras negligencias.
ResponderEliminarEl instante volátil, ay. Al menos no pontificará como otros.
EliminarMe vas a perdonar, pero ese poeta es un auténtico capullo que solo quiere epatar.
ResponderEliminarSaludos
Sin duda, aunque creo que ni era poeta; claro que ¿qué es y de que se trata eso de ser poeta? Cualquiera se lo pregunta visto su tono.
EliminarSin duda miente. no quiere descubrir sus cartas para wue no le hagan sombra. Va andando , o sea que mira hacia delante. Qué poeta es? ¿Napoleón?
ResponderEliminarRecuerdo vagamente una historia sobre él. Napoleón y las visitadores, creo que era😜
Abrazoo
Ya sabes que la mentira es una seña de identidad, probablemente mayor que la verdad que siempre es más indescifrable y dudosa.
Eliminar(Napoleón tendría sus particulares visitadoras, por supuesto; y si has paseado por la Barcelonaesbona tal vez sepas de la imagen, si es a la que te refieres, pero no tiene que ver lo escrito con el personaje pétreo que anda por un moll)
El poeta paseante,
ResponderEliminarimagina, fantasea y crea,
pero no escribe
mientras pasea.
Con el viento de levante
vuelan los poemas
que imagina y piensa,
el poeta paseante.
Muy dinámico poema el tuyo, pues además certero, ya que tantas ideas y palabras suelen acontecer de manera paripatética. Gracias, Julio.
EliminarEs en el aquí y ahora, en el que el poema es válido, el pasado es solo eso, pasado y pretender influir en futuro, es pura vanidad.
ResponderEliminarLa poesía no es el mejor medio para transformar y aseverar el futuro, pero puede advertir, como cualquier otro género. Claro que los que se dieron a la poesía épica no pensarán lo mismo.
Eliminar¿y quién puede definir que un poeta está haciendo poesía cuando pasea, come o medita?
ResponderEliminar¿Se es poeta las veinticuatro horas?
¿O se es a tiempo parcial?, sólo cuando se escribe.
Complejo lo veo.
Se es por un repente o una observación ocurrente, de veinticuatro horas nada. Por supuesto, una cosa son las inspiraciones a pie de calle y otras trabajar una y otra vez esa inspiración con las palabras hasta que les parece haberlas pulido. Lo interesante es practicar y no creerse ni más sabios ni más bondadosos por ello. Gracias, Miquel.
EliminarEso es lo que se llama "arte por arte" en estado puro. Es muy romántico, pero es casi imposible desperender al arte de propósitos uteriores... la fama, la denuncia, el testimonio, la memoria o la inmortalidad... cosas que, sin ser garantía de éxito, suelen subsistir en la obra
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, y mejor olvidarse de éxitos que se deban a reconocimientos orales, creo que la satisfacción interior es más exitosa. Las palabras de los hombres son siempre torticeras.
EliminarUn poquito soberbio este poeta , no ? Estoy de acuerdo con tu último comentario, la satisfacción interior y personal tendría que ser lo más importante. Besos.
ResponderEliminarDebe ser todavía del clan de aquellos bohemios pasotas que no tenían dónde caerse muertos y no daban un palo al agua. Lo de la satisfacción, Laura, se impone o debería imponerse como objetivo cotidiano ante cualquier conducta, labor y situación; otra cosa es que se logre.
EliminarCreo que hay poetas que se miran el ombligo, pero poesía es mirar y sentir, imaginar y plasmar, ser partícipe de la vida. Al menos nos no ser espectador de piedra.
ResponderEliminarPero igual me quivoco. Un abrazo
Sí, pero no solo en los poetas sino también en narradores, y me parece bien que cada cual escriba y ejercite y algunos se suben a la parra enseguida. Pero de egos está el mundo lleno, en cualquier oficio o afición. Claro que para todo también están los testigos, incluso en la política, no hay conducta humana individual que escape a la mirada y el enjuiciamiento de los demás. Estoy de acuerdo que hay que mirar y dejarse influir, ser receptivos y sensibles, es un proceso muy personal que cada cual sabe cómo se lleva a cabo y lo que aporta a cada cual. No te equivocas.
EliminarÉ o momento...o que nos enche a alma, a memória que nos faz sorrir...
ResponderEliminarE é eterno..
Belo.
Beijos e abraços
Marta
O dudar de lo superfluo que nos venden como importante.
EliminarCreí haberte comentado. Ser poeta, que no es oficio, es precisamente mirar alrededor, no mirarse al ombligo, pero hay ex-cátedras para todo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es que entra como spam y cuando le da la gana, te lo aseguro.
Eliminar"Anar endavant/ com qui fa punta a un llapis./ Progrés enrere".
ResponderEliminarPero ¿te das cuenta que sacar la punta del lápiz implica la merma del mismo lápiz? Y sin embargo lo importante es que el lápiz siga escribiendo, dibujando, delineando...
EliminarFáckel:
ResponderEliminarpero yo creo que el poeta busca siempre la eternidad. Escribir un verso es querer perpetuar el momento. Si el poeta buscara lo efímero, rompería los versos nada más escribirlos. El escultor aporrearía su estatua nada más acabarla. El músico rompería no sólo las partituras sino los instrumentos.
Salu2.
Bueno, ellos sabrán lo que buscan.Hay de todo. Soy escéptico sobre eternidades y trascendencias, pero ya se sabe que las expresiones artísticas han estado estimuladas por los mitos, las leyendas, las creencias, etc. Está ya todo muy trillado.
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