"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





lunes, 10 de octubre de 2022

Aquellos cosacos de Zaporiyia, versión Ilyá Yefímovich Repin

 



Y de pronto se me ha iluminado. No sé si por los bombardeos rusos a la población civil de Zaporiyia -y hoy a Kiev y otras ciudades ucranianas- o por otra clase de asociación de ideas. Aquella exposición que disfruté en Madrid al borde del nuevo milenio traía cuadros de pintores rusos del siglo XIX. En otra ocasión vi otra muestra sobre el realismo socialista soviético, que también ofrecía su particular interés, aunque era otra cosa. Pero las obras del siglo XIX, donde los artistas rusos querían ser tan europeos como los franceses, holandeses, españoles o ingleses, me pareció sumamente interesante. Y es que el arte europeo de siglos pasados, donde se reflejaban comportamientos de vida cotidiana, paisajes de cercanía, retratos de personajes ordinarios o influyentes también sedujeron a los creadores plásticos rusos. Aquellos cuadros expuestos procedían de la Galería Tretiakov.

Me ha iluminado el vago recuerdo de aquel cuadro que es puro ardor. Cuya composición casi había olvidado, pero que buscando buscando he dado con ella en la red. Ilyá Yefímovich Repin (1844-1930) pintó en 1880 una escena basada en la leyenda sobre un supuesto episodio histórico. Un grupo de cosacos respondiendo por carta al sultán otomano Mehmed IV, se titula. Parece ser que este propuso a los cosacos que dejasen de incordiarle, exigiéndoles sumisión. Copio y pego la propuesta: 

"Sultán Mehmed IV a los Cosacos de Zaporozhia: Como sultán; hijo del profeta Mahoma, hermano del sol y de la luna, nieto y virrey de Dios, regente de los reinos de Macedonia, Babilonia, Jerusalén y Alto y Bajo Egipto, emperador de emperadores, soberano de soberanos, caballero extraordinario jamás vencido, firme guardián de la tumba de Jesucristo, fideicomisario y elegido del mismísimo Dios, esperanza y confort del pueblo musulmán, cofundador y gran defensor del cristianismo... Os ordeno, cosacos zapórogos, que os subyuguéis a mí de manera voluntaria y sin resistencia alguna. Os mando, además, desistir de seguir incomodándome con vuestros ataques".

Los cosacos, que siempre tuvieron a bien su orgullo independiente y de resistencia a cualquier imposición se tomaron a chacota la oferta sultánica. La respuesta cosaca fue insolente, rebosante de exabruptos, burlas e insultos. Vuelvo a copiar y pegar:

"Cosacos zaporogos al sultán turco. 

Oh sultán, demonio turco, hermano maldito del demonio, amigo y secretario del mismo Lucifer. ¿Qué clase de caballero del demonio eres que no puedes matar un erizo con tu culo desnudo? Cuando el demonio caga tu ejército come. Jamás podrás, hijo de perra, hacer súbditos a hijos de cristianos; no tememos a tu ejército, te combatiremos por tierra y por mar, púdrete.

¡Sollastre babilónico, loco macedónico, cantinero de Jerusalén, follador de cabras de Alejandría, porquero del alto y bajo Egipto, ladrón de Podolia, catamita tártaro, verdugo de Kamyanéts, tonto de todo el mundo y el inframundo, idiota ante nuestro Dios, nieto de la serpiente y calambre en nuestros penes. Morro de cerdo, culo de yegua, perro de matadero, rostro del anticristianismo, ¡fóllate a tu propia madre! 

¡Por esto los zaporogos declaran, basura de bajo fondo, que nunca podrás apacentar ni a los cerdos de los cristianos. Concluimos, como no sabemos la fecha ni poseemos calendario; la luna está en el cielo, es el año del Señor, el mismo día es aquí que allá, ¡así que bésanos el culo! 

Koshovýi Otamán Iván Sirkó y toda la hueste zaporoga".

Previamente a conocer estos textos, que son del siglo XIX y pretenden ser copia de unos anteriores, traté de imaginar esa labor colectiva que Repin representa tan expresivamente. Pero la respuesta cosaca ha eliminado cualquier atisbo imaginario por mi parte, porque la carta es en sí ya una obra imaginativa, deslenguada, feroz. 

Solo me queda trasladarme a la escena. Mezclarme con los guerreros y escuchar quién indica que se ponga tal frase o la otra. Quién vocifera que se insulte al sultán. La ocurrencia infame del tipo de grandes bigotes. El calificativo áspero del que no separa la pipa de la boca. El chascarrillo soez del que se sujeta la tripa. El aguijón verbal del que señala con el dedo al escribiente para que lo  ponga en el papel. La caída desternillante del que se inclina hacia atrás. ¡Y la risa contagiosa de todos y cada uno de los asistentes! Por supuesto, no puedo por menos que reconocer al ilustrado escribiente que se lo pasa de miedo, y su sonrisa insinuante y contenida lo demuestra, a medida que toma nota de las propuestas salvajes y las plasma con cierto orden en la misiva. Ignoro qué respuesta, si la hubo, bien textual o violenta, recibirían del sultán. Aunque se tratara solamente de una leyenda en absoluto niega la fama que tenía aquella gente y su actitud dispuesta a la resistencia que, por cierto, cambió de bandos en distintos momentos históricos. 

La obra de Repin es gozosa y, por supuesto, pletórica de testosterona. He leído por alguna parte que Repin estuvo en España un tiempo y conoció la obra de Velázquez. ¿Sería Los borrachos, por ejemplo, un modelo de representación escénica para el ruso?

Ironías de la historia, que hubiera dicho Isaac Deutscher. Repin nació en una localidad de la provincia de Jarkov, hoy Ucrania, y murió en otro lugar de Finlandia, hoy perteneciente a Rusia. Las fronteras no son precisamente eternas, y con frecuencia bastante más movibles de lo que nos pensamos. Y quién sabe si, con cosacos o sin ellos, hay ahora mismo una carta volando hacia el Kremlin cargada de improperios contra el nuevo zar que se pretende de todas las Rusias.





34 comentarios:

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    1. No la conocía y, sea leyenda o no, es divertida. El cuadro, una joya,

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  2. El tiempo varía y lo que ayer era absoluto, hoy no lo es. No tengo duda que más de una carta ha recibido el sr Putin, con más improperios que los leídos.
    El cuadro de Yefímovich, extraordinario. Ya imagino a esa gente todos felices, con gran espíritu en las venas. Todos cada cual disfrutando de crear palabrotas y cosas hirientes.
    La pregunta es: ¿Cómo actuarían los cosacos hoy?. Viendo el descontrol de su país y, la fortaleza que ha demostrado Ucrania que tiempo atrás formaba parte de la Unión Soviética.
    Abrazos Fackel

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    1. Las fronteras han sido todas volátiles. Basta coger un Atlas Histórico y te pierdes. Solamente Europa ha tenido un continuum de modificaciones. De civilizaciones en Asía en la Antigüedad el extravío es total.

      Felices no sé si estarían estos cosacos, pues huelen a vodka casero que apestan, pero hay que ver cómo se lo pasan con esa redacción colectiva.

      También me he hecho esa pregunta, pero los cosacos tuvieron muchos posicionamientos en el pasado, no sé ahora, y creo que quedan.

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  3. Desde luego, la carta del sultán era una provocación a la contestación. Se lo debieron pasa bien los del cuadro.
    He mirado en Wikipedia porque no sabía si cosaco era una raza, una profesión, o un "naturales de". Y la verdad es que sigo sin tenerlo claro. Pero bueno. Sale este mismo cuadro , pero con colores menos estridentes tanto wue parece otro. Pero no. Es el mismo. Por lo que pone ahí...sur de Rusia y ucrania, eran casi más ucranianos que rusos.
    Si que ñe da un aire a "los borrachos". Estos tampoco debían estar muy serenos.
    Abrazo, y bebe más agua😜

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    1. En internet viene bastante información, tampoco yo sé más que tú del tema. La primera vez que oí el término cosaco fue por una zarzuela, Katiuska. ("cosacos de Kazán...", decía una canción) Mis padres eran aficionados al género, yo me aburría en muchas de ellas, porque además no podía seguir la trama, pero siempre había alguna canción que me atrapaba.

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  4. Lo del agua era por lo del riñón, eh?
    Cuando le he dado a publicar he pensado: ahora se va a pensar que lo de beber agua era por lo de los borrachos

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    1. ¡Cáspita!

      (Parecemos de un TBO)

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    2. Pues volví ayer con una de mis reflexiones enlazada a uno de mis errores de publicación de comentarios. Al menos descubrí una de las causas pues por regla general estoy ya tan acostumbrada a errar que suelo olvidar machaque e inoperancia total ya....
      Desde luego no era importante.

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    3. Importante familiarizarnos con el error, sirve también. ¿Será el error una de esas formas de dolor?

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    4. Sinceramente, lo llevo fatal porque me llevo pésimo con el dolor, aún así pretendo mejorar la circunstancia sin caer en el extremo pasota. Por ello respondo a la interrogante.

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    5. Otros también lo intentamos así.

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  6. Bueno, nada nuevo bajo el sol, las cartas que se dirigen los unos a los otros tienen el mismo significado que las que hoy se estarán enviando,
    Saludos

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    1. De momento los mensajes más claros conllevan destrucción y sangre. Y siempre, siempre, los civiles pagando las consecuencias. Tié collons.

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  7. Desconocía el entramado del cuadro. Por lo visto disfrutan con su lectura.
    Salut

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    1. Disfrutan con la redacción colectiva, asamblearia, como ves.

      Yo no sabía del significado, y apenas recordaba el cuadro de aquella exposición que vi hace tanto tiempo. Pero a veces la sutil y recóndita memoria obra destellos.

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  8. Aquello fue un espectáculo de risas y jolgorio. Sí, pero los muertos, que fueron muchos. quedaron al margen del espectáculo y sus allegados no participaban en la fiesta.
    Leo estas cartas del sultan y de los cosacos y pienso en la sarta de insultos que hoy son proferidos en los parlamentos. De una manera o de otra, vemos a impresentables engreídos que se creen que son los más capacitados.
    Saludos

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    1. Con los insultos, improperios, mentiras y resistencias chulescas de nuestros días -sea en sede parlamentaria, como la llaman, sea por los mass media- cada cual que los profiere se retrata. Lo preocupante para mí es que los espectadores no quieran ver las fotos reales y lo que hay detrás de las fotografías. Sería tan fácil si nos quitáramos todo el velo de los ojos...

      Sí, el jolgorio que reproduce el pintor Repin era tan intenso como pasajero. Después vendría el desquite. Creo que la misma Catalina la Grande cargó duramente en otras circunstancias contra los cosacos.

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  9. A pintura é muito actual... O passado repete-se...Repressão, vingança, tortura e traição.
    Haverá sempre que se ache o dono do Mundo e que o poderá insultar.
    Um texto interessante como sempre.
    Beijos e abraços
    Marta

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    1. Desgraciadamente, los odios y las agresiones se repiten una y otra vez En cualquier rincón del mundo. En ocasiones causando daño a millones de personas. Este cuadro es pintoresco pero las circunstancias de cuanto ocurre hoy día tienen poco de diversión y sí de llanto. Saludo.

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  10. El cuadro es de lo más realista, se ve bien el arrebato del momento. Si las cartas son más o menos exactas, los cosacos estaban fuera de sí, y su repuesta fue una salvajada. Sin duda una carta imaginativa, que bien poco dejo a la imaginación de su destinatario.

    Las fronteras, como cualquier otro limite, siempre plantean interrogantes. Fronteras, banderas, políticas (antes disfrazadas de religión) siempre han sido la excusa perfecta para sacar el lado más visceral y descabellado del ser humano. Por desgracia, siempre los mismos han de pagar el precio de la contienda, lo hemos aceptado así y son miles de años en contra del sentido común, nadie quiere la guerra, salvo el desalmado que saca provecho y no necesita poner su vida en peligro.

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    1. Yo creo que será una leyenda, pero no es descartable que tuviera lugar algo aproximado. Ya sabes que en los mundos épicos la ficción se eleva a un plano real y tangible, siquiera para que se transmita a las sociedades y a nuevas generaciones. Luego todo ello tiene la utilidad de la manipulación, como hemos comprobado en tantos y tantos relatos que vienen desde antiguo y se han usado para satisfacción de clanes y de masas.

      Y sobre las excusas plasmadas en símbolos, territorios, políticas, etc. pues todos nos empeñamos en ello. Quien más o quien menos se adscribe a alguno de los bandos que siempre hay en litigio en nuestras sociedades. Incluso los que dicen permanecer al margen y no votan, por ejemplo.

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  11. Eso si que es insultar a lo grande. La verdad es que me ha hecho sonreír el intercambio espistolar.

    Leer la carta de los cosacos y mirar el cuadro es una delicia, eso sí luego una se pone seria y triste cuando se imagina la cantidad de personas inocentes que hay entre la prepotencia del sultán y la brabuconada de los cosacos...

    Parece que la civilización de la que hacemos gala desde entonces está hecha jirones y se repite la historia, sin tanto ingenio, quizá,
    pero con igual o más crueldad.

    Un beso,

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    1. Yo no solo sonreí sino que me contagiaron estos tipos de testosterona bestial y acabé riéndome con ellos y proponiendo, a mi vez, nuevos adjetivos descalificadores. No se me ve, pero estoy detrás, allá al fondo.

      A quienes piensen, porque han nacido en tiempos de paz y entre mimos, que los problemas de violencia y destrucción son recientes les recomiendo Ilíada, por ejemplo, o Leyenda de Gilgamesh, más antigua o por ahí. Se cree que Homero más que un personaje era la transmisión de leyendas que fueron tomando cuerpo y se plasmaron en aquello de Troya. Peor lo que importa es que ya en viejas edades culturales y de desarrollo humano se planteaban los mismos problemas que tenemos hoy para resolver por las armas la supervivencia. Gracias, Tesa.

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    2. Creo que se me fue un error de tipeo.

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  12. La mayor parte de estas cuestiones son mitos para reforzar las creencias colectivas. Yo también soñé ser Miguel Strogoff después de leer a Verne, es inevitable.
    Vi esas mismas dos exposiciones que citas y fueron sorprendentes. Cuánto desconocemos del arte ruso.

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    1. Strogoff...al servicio de un zar al que luego detestamos. El Cid es otro de esos personajes del que hay todo un poema seguramente con contenido de sobrevaloración y épica, aunque de eso sabrás tú más que yo.

      Desconocemos del arte ruso y de muchos otros. Yo de Munch no sabía nada hasta otra exposición hace muchos años en Madrid, donde trajeron uno de sus Gritos.

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  13. Las bravuconadas y la tisudez siempre han distinguido a los hombres bárbaros, sin distinción de raza, nación o ideologia

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    1. Pero todos llevamos nuestra dosis de barbarie dentro también, sin distinción de género incluso.

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  14. Fáckel:
    interesantísima esta entrada (que no desmerece otras, claro). ¡No estaría de más que la carta de respuesta de los cosacos la recibiera también, debidamente actualizada y pasada por el filtro de lo políticamente correcto, el zar de los zares de la zarería..!
    Salu2.

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  15. El tema de esta carta, seguramente ficticia, lo he conocido recientemente, así que tan sorprendido y divertido como tú me hallo. Ahora me preocupa el zar actual y todo el montaje agresivo que se trae.

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