"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





viernes, 17 de abril de 2015

Atrapado












Imágenes visibles e invisibles que te pasan por la cabeza mientras permaneces atrapado en el ascensor, a oscuras y solo: en principio, ninguna. La química del cuerpo responde por ti, los reflejos tantean posibilidades de fuga, el sistema emocional vibra. No hay ideas, sólo impulsos y neuronas nerviosas en acción. Las ideas se postergan; llegarán cuando aceptes tu situación. Por más que das al timbre sólo lo oyes tú. Si otros lo oyen no atienden, y eso te preocupa más. Empiezan entonces las ideas, desagradables, tales como: vivimos en soledad, estamos abandonados unos de otros, mucha técnica y escasa cooperación, etcétera. Luego las metáforas: esto es lo más parecido a un útero pero no para engendrarnos en él, estoy colgado de la pared de una montaña, desafío gravitatorio, más etcétera. Después las preocupaciones no menos banales: hoy no comeré a este paso, no sé si me aguantaré sin mear, debería aprenderme textos de memoria para no aburrirme en casos como éste...Por último, satisfacción que compensa el desaliento que asoma, tal como: qué bien que desconecto, que no tengo que soportar a antipáticos, que no me caen regañinas, que no puedo acudir al trabajo, que no veré televisión. Recurso a la paciencia: te sientas a tientas, al agacharte apoyas las manos en lo que por su frialdad intuyes que es el espejo, te divierte la idea de que lo invisible se contemple en él pero tú no. Remate: acaso la muerte sea algo así, donde dejas de verte en tu corporeidad.  



(Fotografía de Duane Michals)


6 comentarios:

  1. Pues la verdad no se que es mejor si verla o no, la muerte, ( digo), es imposible no mirarla...
    Un beso, Lindo texto.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tiempo al tiempo para obtener respuestas, que acaso en su momento no nos interesen. Gracias Azzul.

      Eliminar
  2. Debe ser una experiencia grata ese percibir al yo como un ser lejano y distinto, como un punto de fuga de nuestros sentidos. Un fuerte abrazo y una vez más una alegría asomarme a tu blog. Feliz viernes desde Rivas, con luz y sombras.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No dejamos de hacer preguntas a los espejos y tener celos de ellos cuando ya no nos encontramos delante. Tiene tantas confidencias acumuladas...Feliz día de asueto, José Luis.

      Eliminar
  3. 1- Para J.L.Morante: Afirmativo.
    2- Me ocurrió con los dos perros y como he de beber agua en abundancia, asunto micción, preocupante.
    3- Me rescató un precioso veinteañero y además me enseñó a desbloquear la puerta desde el interior.
    4- Hay quien tiene fortuna hasta en la gatera. Menuda injusticia!!! O no???

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Ves como todo tiene su importancia en cualquier momento y circunstancia? Otra cosa es no dramatizar. Controlar siempre la situación, pero si esta se alarga, liberarnos de prejuicios por el bien de la diálisis natural, por ejemplo.

      Eliminar