martes, 20 de diciembre de 2011
Piensa en lo que dice Mahmud Darwix
quiero que escuches un poema, me dice; ayer te recité un par de versos que me llamaban la atención especialmente; pero el resto del poema no tiene pérdida; hay algo en él que conecta con una mentalidad que cultivaba hace años, ¿como diría yo?, un discurso más solidario o más cooperador o más atento al exterior sufriente o más cristiano, no sé; ¿te sorprende este lenguaje a estas alturas?, me dice acaso por mirarle con cierta perplejidad, yo que no le conozco de toda la vida y que en ocasiones resulta un manantial incesante de novedades para mí; con esto no estoy diciendo que sean propiedad de la religión las buenas voluntades, por supuesto que no, matiza; este poema me sitúa de nuevo ante el dilema de si el sentimiento por el dolor ajeno expresado y expreso es presencia cultural de alguna de las religiones del Libro o una manifestación anterior; las religiones, que han manipulado casi todo, han intervenido sobre la conciencia del ser y atrapado el sentimiento del individuo; pero imagino que la herida de la vida destacó desde el origen en los clanes y las tribus un instinto de apoyo mutuo; naturalmente, sospecho que no por ideología, apenas esbozada o siquiera muy primaria, sino por la conciencia de que la propia supervivencia individual no era posible sin el respaldo y la cooperación de más individuos; ¿te das cuenta?, en el fondo de todo siempre está el uno; el hombre único que apenas es nada frente a la totalidad pero lo es todo para sí mismo; y ese instinto de apoyo mutuo, de la necesidad de salir adelante, se manifiesta continuadamente; no basta con que los que viven mejoradamente tengan un cierto grado de identificación formal con los que sufren, sobre todo porque es aparente; no hay identificación con el sufrimiento si no se padece; porque sin ese otro elemento que la cultura ha ido desarrollando y que algunos llaman concepto de la justicia nada tiene valor; y esa idea, esa necesidad, esa exigencia clamorosa de llevar a efecto la justicia nos remite a nuestros límites y al problema universal; por eso quiero que escuches este poema entero de Mahmud Darwix, al que titula Piensa en los otros; y el poema, que hace pensar, que te revuelve los hígados desde su amable sencillez, dice:
Tú que te haces el desayuno, piensa en los otros
(no olvides alimentar a las palomas)
Tú que te enzarzas en tus batallas, piensa en los otros
(no olvides a los que piden paz)
Tú que pagas la factura del agua, piensa en los otros
(los que maman de las nubes)
Tú que vuelves a casa, a tu casa, piensa en los otros
(no olvides al pueblo de los campamentos)
Tú que te duermes contando estrellas, piensa en los otros
(hay quien no halla dónde dormir)
Tú que te liberas con las metáforas, piensa en los otros
(los que han perdido el derecho a la palabra)
Tú que piensas en los otros lejanos, piensa en ti
(di: Ojala fuese vela en la oscuridad)
(Imagen del ceramista y pintor Íñigo Dueñas)
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todos somos uno e interrelacionados por eso será, entre otras cosas, que nada es lo que parece.
ResponderEliminarYa sabes, el ego, la máscara, etc. Recientemente vengo de un agradable baile de máscaras, muy muy agradable. Afortunadamente el placer y la alegría y el gusto, gustazo, la belleza y la buena mesa existen, aunque sean parte de la apariencia donde se desarrolla la vida, pero producen felicidad compartida, que es la mejor. Bs.
Vaya, Emejota, pues espero que el baile de máscaras haya sido también un exorcismo y no una mera boutade, que es lo que hoy se lleva por doquier.
ResponderEliminarA mí el poema me ha parecido una preciosidad, teniendo en cuenta que su autor es un poeta palestino que murió hace tres años y cuya obra resuena y actualidad con una vitalidad extraodrinariamente. Hay quien considera a Mahmud Darwish como uno de los mejores poetas árabes del siglo XX. Tanto él como Adonis son mis descubrimientos más recientes, aunque no hay del primero mucha obra publicada todavía.
En fin, ya sabes, buscando el valor de las palabras siempre. Alivian, reconfortan y nos afirman.
Salud y abrazo.
Desde su amable sencillez, es incisivo. Me hace reflexionar, y soy incapaz de decir nada. Apunto su nombre, además que siempre me gusta aprender, de la poesía árabe. Sencilla e incisiva.
ResponderEliminarSaludos.
ccRider. No siempre es tan sencilla. Hay una poesía tradicional, antigua, que formalmente lo parece, pero tiene una dimensión existencial enorme. Y Adonis, por ejemplo, no es nada fácil, pero explorac las profundidades.
ResponderEliminarSí, te recomiendo prospectes en ella. Saludos.
Fackel, la entrada es bastante interesante y realmente te hace formular preguntas, que aunque si respuesta aparente, se pueden encontrar.
ResponderEliminarEl poema, es sencillamente genial y (como dices) de una profundidad tal, que no está al alcance de cualquier mortal de ser comprendida (por desgracia...) y es cierto que la poesía (o filosofía) árabe, es de una magnitud abrumadora en cuanto a su profundidad... tal vez, están en otro mundo, en otro tiempo... vete a saber. Sólo con ver las maravillas que nos dejaron, como la Alhambra de Granada o la Mezquita de Córdoba, hablan a las claras de una sabiduría compleja y de un gusto esquisto.
Te sigo...
Un cordial saludo.
Solo podemos identificarnos con el dolor de los otros,cuando somos atacados por la misma causa.
ResponderEliminarSolo entenderemos la miseria,cuando seamos desposeídos de la propiedad.
Solo nos morderá la carne la injusticia ajena cuando seamos ajusticiados sin délito alguno.
Y es que todos estamos expuestos a ser víctimas o verdugos, depende del grado de humanidad que poseemos.
Un abrazo
Utopazzo, no sabes cuánto me alegra encontrar a quien le guste la poesía árabe. Yo mismo me considero mero catador, pero es un fruto que entra tan bien, me siento tan receptivo que te pide ir a más. Y poco a poco lo intento. Y ya sabes, una obra te lleva a ota, un estilo te abre otros estilos,un autor te conecta con tiempos históricos y con otros poetas...
ResponderEliminarGracias por tu sensibilidad, buen miércoles.
Cierto, Genetticca. La misma causa, la misma angustia, la misma herida. Esto es así. Por mucho que digamos de solidaridad de sillón o de comodidades occidentales, no sabemos lo que es el sufrimiento ajeno. Por eso es bueno mantener memoria, lo que oí contar a mis padres de los maloes (peores) tiempos, abre nuestro corazón a cierto grado de compensión con el otro sufriente. Pero nunca es lo mismo. En efecto, todos podemos estar enun rincón u otro de la habitación del momento histórico y manifestarnos como víctimas o verdugos, como dominadores o aplastados.
ResponderEliminarTu comentario no dejo de dar vueltas, es excelente en su claridad rabiosa, si me lo permites. Que yo comparto en su plenitud.
Salud.
Pienso en lo que dice Darwix. También en lo que calla.
ResponderEliminarHe de poner una apostilla, sin embargo: ser vela en la oscuridad. ¿De verdad no hemos sido capaces de inventar una metáfora mejor?
Estas imágenes esclerotizadas (citas a Adonis, y recuerdo sus interminables desiertos y oasis, su luz y su transparencia), y la reverencia religiosa implícita en el poema, me recuerdan por qué no me gusta Darwix.
No sólo hay que liberarse con las metáforas. También "de" las metáforas. O no estaremos más que construyendo cobardes afluentes que van a desembocar al gran río de las Grandes Verdades Reveladas. Donde, hay que recordarlo, resulta muy cómodo vivir.
Acepto, pues, gozoso el mensaje de pensar en los otros; deploro la factura formal del poema y sus imágenes fosilizadas
más riesgo, hermano, más entraña hay que pedir a los poetas
un abrazo para ti
Stalker. Para mí es nuevo este autor. Se ve que tú lo conoces mejor, lo cual te permite interpretar y disentir de su obra. Entiendo -acaso leo mal tu frase- que metes a él y a Adonis en el mismo puchero. No tengo suficiente juicio al respecto, así que bienvenida cualquier observación al respecto.
ResponderEliminarNada más que decir. Simplemente leo y a mí me gusta leer también esto, y enterarme, y si viene a cuento, disfrutar, claro. Leo primero para catar y si me gusta un autor seguir nutriéndome de lo que me brinde. A esos poetas poco les puedo pedir, prácticamente han escrito su obra y uno de ellos ya ha muerto.
¿Lenguaje esclerotizado, imágenes fosilizadas? No sé. Mis conocimientos sobre poesía son limitados. También hay en el otro extremo poetas con lenguaje críptico e intento también escucharles. Tenga o no reverencia formal este poema de Darwix, me gusta y por eso lo he puesto.
Por cierto: ¿debemos liberarnos a través de las metáforas o debemos liberarnos de ellas? No sé, sospecho que se trata solo de domarlas y saber hacer uso adecuado. Por mi parte no me preocupan siempre que no cubran y vuelvan opaco el mundo del lógos, naturalmente. Las metáforas deben servirnos, indudablemente.
Salud.