"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





lunes, 25 de diciembre de 2023

Lectura de la vida según Jorge Manrique

 



Lectura festiva de un día de celebración para unos y simplemente no laboral y de asueto para otros. Porque leer al hijo del Maestre de Santiago Don Rodrigo Manrique en este extenso poema exclusivo que tiene su miga también brinda su goce. No, no me guía ningún criterio barroco y decadente, y mucho menos de un romanticismo tardío. Ni siquiera pesimista y deprimente. Nunca lo leo así. Es un punto de reflexión al que quedamos invitados todos los de la edad tardía, que dicen los repetidores de tópicos y eufemismos. ¿Que ya sabíamos de qué hablaba el poeta 547 años después de escribir las Coplas? Nunca sabemos comprender un texto salvo cuando nos toca en la carne. Sí, en la carne, en el cuerpo, en el momento en que el organismo habla con dudas y a la vez con convencimiento y se funde con las palabras sabias de escribientes que nos precedieron. Así, que sin que nadie me lo impida voy a seguir leyendo estas Coplas con la sonrisa que produce la perplejidad en mis labios y en mi mirada. Y ¿sabéis? Leer como en un espejo reconforta. Es siempre un brindis a la aceptación de uno mismo. 


(Esta lectura la hago en una impresión de 150 ejemplares de Ediciones Artesanas, de Cuenca, bajo la edición de Julio Martinez y Segundo Santos  y el cuidado de Beatriz Miranda Garcia. Prólogo de Gustavo Martín Garzo. Año 2003)








7 comentarios:

  1. Así, con tal entender,
    todos sentidos humanos
    conservados,
    cercado de su mujer,
    Y de sus hijos y hermanos
    y criados,
    dio el alma a quien se la dio,
    el cual la ponga en el cielo
    y en su gloria,
    y aunque la vida perdió,
    dejónos harto consuelo
    su memoria.

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    1. Buena memoria. Lástima que en nuestros tiempos jóvenes no captáramos todo el sentido de las Coplas.

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  2. Muy buenos poemas, qué maravilla que algunas situaciones se intuyeran hace tantos siglos.

    Gracias por copartir. Feliz salida de año.

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    1. Buenos días, MP. No solo las Coplas sino otras obras de Manrique son excelentes. Lástima que nos ocurriera como con el Quijote o Góngora u otros en nuestros tiempos tiernos, que no entendíamos nada. Solo nos seducen a medida que hemos vivido y comprobado. Ahora valoramos la laiteratura pretérita -bueno, los que la valoramos, porque sigue siendo ignorada por gran parte de los españoles- y nos toca profundamente.

      Quedan unos días para terminar un año y comenzar otro, pero al cuerpo universo y al cuerpo individuo ¿qué les importa eso? (Bueno, a este último algo más porque vive muy preprogramado, no sé si para bien o para desdicha)

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  3. "Nunca sabemos comprender un texto salvo cuando nos toca en la carne": "solo digo mi canción para quien conmigo va" (del Romance del infante Arnaldos), i "cuando tu vibras es que yo vibro en ti" (que crec que era de Machado).

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    1. Y cuando lo que dice un texto queda representado en nuestra carne -nuestra experiencia, nuestro padecimiento, nuestra comprobación- es cuando realmente llegamos a comprender lo que está escrito.

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  4. Fáckel:
    leer las coplas de Manrique siempre es un acierto y se disfruta mucho ese castellano.
    Salu2.

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