"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





lunes, 7 de noviembre de 2022

Miedo. Miedos

 




















Descubrimos en la edad más temprana al compañero de viaje. Sin duda la brusca salida del hogar en que nos estuvimos horneando ya nos lo diera a conocer. La que nos abrió la puerta trató de ahuyentarlo con su arropamiento, su palabra dulce, sus miradas deleitosas, su sonrisa letificante, su ubre generosa y cálida, su regazo siempre ardoroso, sus cuidados. El compañero de por vida jugó a salir y a esconderse. A vestirse con nuestra piel y a apropiarse de nuestras emociones. Unas veces habrá sido una señal. Otras, un espectro turbulento y obsesivo. Las más de las ocasiones una sombra. Si la criatura no reaccionaba a estímulos alternativos el compañero podría convertirse en su enajenación. 

A medida que afrontamos la vida descubrimos que se trata de un compañero plural. Aunque singularicemos para cada paso concreto nos parece que hay tantos acompañantes como pasos. No nos engañemos. Es el mismo aunque se revista con una imagen diferente para cada ocasión. 

Ese compañero vitalicio es conocido como Miedo. ¿Tiene historia el Miedo? ¿Son capítulos de esa historia individual -y ojo, también colectiva- los Miedos? Nacemos y sucumbimos con un compañero de viaje al que sorteamos constantemente. Que nos acecha, nos acosa, nos maltrata, nos acompleja. Nos reduce. Quedará huérfano cuando ya no estemos. En su desamparo, egoísta mas equivocado, presumirá irónico: cuánto me echaréis de menos. ¿O él a nosotros, a fuerza de haber perseguido siempre que nosotros hubiéramos sido solo él?



(Pintura de Peter Birkhäuser)

32 comentarios:

  1. Sí, los miedos nos acompañan desde la cuna hasta la fuesa, no hay día sin miedo de un tipo u otro. Los hay más concretos y los hay más metafísicos, pero, ciertamente, son la compañía más cercana a nuestra vida y que producen sentimientos variados de desamparo, zozobra, desolación, ansiedad. La vida es aprender a vivir con ellos.

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    1. Y encima a veces se acumulan y el riesgo de no interpretarlos o reconducirlos es peor. Sin duda que aprendemos a convivir con ellos, pero pueden ser obsesivos pues no dejan de ser recurrentes.

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  2. El miedo atenazante es un mal compañero de viaje.

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    1. Despersonaliza, desgasta, destruye. Mientras sea pasajero...

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  3. El miedo suele esconderse en los espejos, a veces huye si lo miramos con determinación...

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    1. Pero no le gusta que nos pongamos chulescos con él. Puede tomar la revancha.

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  4. Hay una hermana de la Caridad (Teresas de Calcuta) que ya no está con nosotros porque la han enviado a Tanzania. Con esta hermana (María José se llama) siempre hablábamos de su orígen. Ella es de Uganda.
    Yo, como soy un ignorante en cosas africanas le preguntaba por las tribus, el animismo, la cristiandad dentro de lo que son las tribus, los animales, el pueblo, en fin, de todo. Ella, una persona que sabe cinco idiomas perfectos (inglés, francés, español, alemán y el suyo de la tribu), y que había recorrido medio mundo, me explicaba cosas de allí. Entre esas cosas había una que me llamó la atención, en el idioma de su tribu, la acholi la lengua (luo) no existe la traducción a la palabra miedo, pues desconocen el valor de esa palabra, por lo tanto carecen de él.
    Quizá si desconocieramos lo que quiere decir no nos acompañaría de la manera que lo hace, casi de forma permanente.
    Un abrazo

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    1. No sabía esa anécdota, y no sé si creérmela. Tal vez no exista la palabra pero sí la emoción. Esta salta sin que en la conciencia salga el rótulo de Miedo. Pero mira, me ha picado la curiosidad. Tal vez por vía antropológica se pueda indagar en esa supuesta carencia. El miedo -sentimiento de impotencia al fin y al cabo- es tan primitivo como la Humanidad. Es un primitivo actual a su vez, de todo tiempo y lugar e individuo. ¿No nació precisamente la magia y la religión como supuesta compensación del miedo? El miedo -como dios, los dioses- puede ser la soledad del individuo: sentirse en que no se puede traspasar los límites.

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    2. Supongo que en el interior de cada individuo el miedo como cosa "per se" se sentirá en las ocasiones que sean propicias, como por ejemplo ver un cocodrilo cerca. pero me refiero a la "palabra" escrita que expresa esa sensación. Por lo demás poco puedo decirte porque tanto no llegué a indagar.
      Un abrazo

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    3. Yo tampoco puedo añadir más, me pilla ignorante.

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  5. Me suena a que ese miedo se llama Muerte. El origen y conclusión de todos los miedos.
    Un abrazo

    Espero tu foto de infante para la tarjeta navideña de este año? Más detalles, en mi blog

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    1. Neo, me has hecho recordar un poema de mi amado León Felipe_

      "Yo no sé muchas cosas, es verdad.
      Digo tan sólo lo que he visto.
      Y he visto:
      que la cuna del hombre la mecen con cuentos,
      que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos,
      que el llanto del hombre lo taponan con cuentos,
      que los huesos del hombre los entierran con cuentos,
      y que el miedo del hombre…
      ha inventado todos los cuentos.
      Yo no sé muchas cosas, es verdad,
      pero me han dormido con todos los cuentos…
      y sé todos los cuentos."

      Sí, leí lo de la foto, a ver si encuentro alguna que merezca la pena, no tengo muchas, y en la obligada de la primera comunión estoy de pena

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  6. Los miedos ya nos los metieron desde el momento que bajamos del árbol, las iglesias lo refinaron
    Saludos

    Saludos

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    1. En principio ya se encargó la madre Naturaleza, después llegaron los anti o contranaturales que citas.

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  7. Mira hermano, el miedo nos roba vida, y esta es nuestra única y verdadera posesión, por tanto conviene alejarlo de nuestro pensamiento por mucho que insista la sociedad y la historia tanto familiar como social y mundana. Cuanto más me azuzen más me rebelaré. Ahora por fin puedo.
    El miedo es el peor de los ladrones. Lo que más temo es la naturaleza humana y ya ves, me intento alejar del mundanal ruido. Lo sé porque soy muy precavida, lo cual se confunde con temor, pero yo no lo vivo así por más que lo crean los demás. Es la única batalla que sigo y persistiré en seguir librando hasta la muerte. Que si , que en ese momento abandonaré apegos, afectos y memoria. Mejor, mayor libertad y me da lo mismo que sea consciente o inconsciente.... con lo que me gusta dormir!
    Vista así la cuestión ayuda.
    Ahh y cuidado que la imaginación lo mismo libera como azuza los temores. Elijamos lo mejor, pues. La decrepitud me daba miedo, pero al asumirla se ha evaporado. Y el dolor aún me da miedo, pero cada vez menos pues seré muy valiente y actuaré como tal. Cuando ya no lo soporte perderé la conciencia y se habran acabado las limitaciones humanas.
    Por cierto mañana se teme lo peor por el rollo del eclipse de luna junto Uranete el gamberrete. Anda mucho temor suelto a causa de los mosqueos Su actual ubicación inspira mucho el arquetipo de movimientos bruscos de tierras y aguas. Amén del rubicón norteamericano. Nahhhh, ni caso, en el peor de los casos nos ayudará a perderle el respeto al miedo!
    Escribo en plan personal porque es de lo único que conozco algo, más no por protagonismo. A ese ni caso, ya no toca!

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    1. Sí, el Miedo es el Gran Ladrón. Y sin quererlo ni beberlo se constituye en el compañero de viaje del individuo. Aunque solemos pensar en ese miedo soberano que es la muerte, en realidad vivimos con tanta intensidad los miedos cotidianos -los efectivos y los imaginados, soñados o sugestionados- que no damos abasto. A veces el mejor sistema es no hacer aprecio, pero hay males del cuerpo o de la economía personal o de las complicaciones múltiples en que vivimos que el miedo nos sonríe sardónicamente hasta en sueños. Los profesionales de la psiqué dicen que el miedo es un mecanismo de alarma, que nos pone en guardia, y aguza el ingenio y el sentido de la huida -sobre la huida deberíamos reflexionar más- pero claro depende de cómo lo gestionemos, que se dice ahora. También coincido contigo que la imaginación puede alejar o azuzar los temores, depende yo creo de la personalidad del individuo. No en vano hay una amplia literatura que fascina y captura los temores -¿o toda la literatura tiene una parte de ello?- y en eso el romanticismo supo acuñar y dejar escuelas. No sé si temer al Urano entrometido con la Llena, pero el maldito demagogo USA puede mañana tener su día de gloria nuevamente, y eso no da miedo, da pánico.

      Bien por escribir en plan personal, siquiera por desahogo y como charla de café.

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  8. El miedo irracional que atenaza es horrible. Pero el miedo natural es necesario. Salió un entendido ( no sé cómo se llaman los entendidos en esto), pero decía que era necesario para la supervivencia de la especie. Ahora creo que hablaba del Stress.bueno el miedo es un componente del estrés. Aquello de que los indios ¿cherokee? no tenían vértigo, cuando construían los rascacielos , no era verdad.
    Jau🤚

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    1. Para mí que todo miedo es irracional, desde el momento que racionalizas situaciones y las haces frente el miedo baja su presión o desaparece. Aunque luego vuelva u otra modalidad. Los indios, pobres, fueron tan manipulados, usados y tirados por las prepotentes élites blancas de los USA que igual valían para los rascacielos que para los frentes de batalla, como los negros. Encima hicieron un gran favor al Ejército, proporcionando el idioma navajo como cifrado de los mensajes secretos. ¿Crees que se lo pagaron?

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  9. Si algo nos acompaña desde que nacemos como un manto invisible es el miedo. Algunos los aprendimos de nuestros padres, abuelos, hermanos y, otros, los fuimos aprendiendo. El principal miedo es a la muerte, luego la enfermedad, al dolor físico o mental. también el miedo al fracaso. Pienso que de alguna forma lo necesitamos, porque nos obliga a ser fuertes y así nos vamos conociendo y aprendiendo de nuestras debilidades.
    Abrazos Fackel

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    1. ¿Manto invisible? Pienso que los sentidos en su totalidad ven mucho, no solo el la visión del ojo. El miedo hace su presencia con diversas formas emocionales, según sea la intensidad del mismo y la capacidad nuestra para afrontar el problema que lo causa. Lo necesitemos o no, el miedo es un hecho real, unas veces y en parte algo personal, otras veces en el sistema colectivo. Las sociedades tienen sus miedos , las situaciones generan miedos colectivos. Y luego hay malditos intereses y falsos profetas que provocan todavía más miedos. Evidentemente, cuando se superan dificultades y causas del miedo nos reconfortamos, aunque no sé hasta qué punto somos fuertes.

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  10. El miedo es un escollo duro de pelar. Creo que tras ese miedo suelen estar las peores decisiones que he tomado en distintas circunstancias, aún asi, saberlo no me libra de caer de cuando en cuando en él.

    Se pueden ir quitando algunos miedos aunque es una tarea titánica pero personalmente, cuando supero alguno, esa liberación me supone una gran satisfacción.

    Buen día!!

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    1. Eso es lo malo, bien dices, tomar decisiones en medio de una situación obsesiva (el miedo suele ser obsesivo) Y no sé si los miedos se quitan. Lo que desaparecen a veces son causas o circunstancias donde los miedos arraigan. Pero como compañeros fieles ahí siguen hasta...

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  11. Haverá sempre medo... medo do que não podemos controlar... o que temos a fazer é enfrentá-lo...Cada um terá que encontrar a ferramenta adequada...
    Um texto interessante.
    Beijos e abraços
    Marta

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    1. Incluso sabemos que hay miedos que nunca podremos superar, pero habrá que considerarlos de la familia individual.

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  12. Te he visto en el blog de MIGUEL y como ahora, que tras años de ausencia en la blogsfera ( no por miedo, más bien por falta de ilusión ; ) la inmensa mayoría de los blogueros que yo frecuentaba ya no están, me asomo a casas como la tuya donde me parece interesante lo que comentáis y por ver si aprendo algo ; ) que nunca es tarde.

    El miedo tal cual comentas, es consustancial al ser humano y sí, adopta muchos nombres ( preocupación, fobia, inseguridad, timidez...) pero en el fondo de todo eso siempre hay es eso, miedo a algo. No creo que exista nadie que no tema a algo y hasta cierto punto es bueno porque nos dispar las alertas, lo malo es cuando nos incapacita para vivir ... ese es el miedo del que creo siempre hay que huir e intentar superar...como sea, casi siempre de la única forma que existe, enfrentándolo y aceptándolo para seguir con la vida...

    Un placer leerte, a ver si recuerdo el camino y otro día me paso ; )

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    1. No creo que haya quien no tenga miedo a algo o de algo o de alguien. Doy por hecho que es un fenómeno psíquico, emocional, con doble cara. Nos permite ponernos en guardia y hacer frente, pero puede agobiarnos y destruirnos. Slo queda conocernos un poco mejor y tomar medidas, tragar saliva y pasar por el aro de circunstancias que nos dan pánico con una actitud de desafío y cierta esperanza, ¿no? Indudablemente, si supone incapacitación para relacionarnos y seguir el rumbo de la vida entonces el problema es gordo. Hacer frente a los avatares, tal como indicas, es lo propio para mantener la salud. Gracias por pasar por aquí, María. Salud siempre.

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  13. Fáckel:
    se me antoja que el miedo es como el agua: se adapta a todo. Si es verano, te sale del cuerpo en forma de gotitas; si es invierno se te congela en el estómago, en el corazón, en el cerebro. A veces te lo secas con la toalla del optimismo y el raciocinio. A veces te cala como un calabobos. A veces se te mete en los huesos. Pero siempre nos rodea. A veces podemos medir en el ambiente hasta un 80 ó 90% de humiedad.

    (Qué inspirado y poético me he puesto hoy, jajaja. Lo mismo retomo estas ideas para mi blog en algún momento, jajaja).
    Salu2 des-pavori2 (que huyen del miedo...)

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    1. Y esa forma de rayo que te recorre desde el pelo hasta los dedos de los pies, sobrecogiéndote el intestino entero...Más que rodearnos se aloja dentro de nosotros, normalmente en silencio, hasta que...

      Muy bien ese ímpetu poéticosensible.

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  14. No he sido un miedoso, ni creo serlo, ahora. De pequeño y joven, e incluso ahora, soy un enamorado de la vida. No tengo al miedo como compañero de viaje, ni personalmente ni en mi familia. Habrá sobresaltos, imprevistos, incluso accidentes y también en familia y me llegará la muerte. Como cada día, el regalo de la vida es bienvenida; y la muerte, cuando llegue, será bienvenida como parte de la vida. No la veo como fin de nada. ¡Ya está bien de miedo a todo y a todo! Se aprovechan los seguros, proliferan los psicólogos , psiquiatras, médicos, y curanderos. Los necesitamos poco, pero viven de nuestros miedos. ofreciendo salud, seguridad, que nadie puede garantizar.
    He ido muy poco al médico, (una vez al año)no tengo seguro privado y vivo libre. Las vacunas en su mayoría son mentiras y difícilmente un medico ofrece garantías de su eficacia.
    Creo que "se hace camino al andar", pero no echo la vista para atrás, sino siempre suelo ir con la cabeza alta y de frente.
    Respeto a todos y a todo, pero también me respeto a mi.
    Un abrazo.

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    1. Comparto tu exclamación: ¡Ya está bien de miedo a todo y a todo! Precisamente antes de todas esas profesiones nació la religión como presunto mecanismo para esconder los miedos. Acaso solo hizo eso: esconder, y no nos enseñó a afrontar. Por lo tanto su mensaje era suscitar más miedos.

      Haga lo que haga cada uno en sus prácticas personales, respeto a quienes no van a apenas a médico alguno así como a quienes recurren por si acaso.

      Pero hay tantos miedos...

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  15. "Quedará huérfano cuando ya no estemos", com els paràsits, que es carreguen el que els dóna la vida.

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    1. Parásito al fin y al cabo, aunque me gusta más llamarle compañero, es más afable y con él tenemos que caminar y hay veces que cuesta lo suyo.

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