Los chicos estábamos pendientes del invento de aquel chalado (así le llamaban algunos a un técnico ingenioso y entregado de mi vecindario de verano en el Norte) empeñado en captar imágenes de la RTF, a pesar de haber un Pirineo de por medio.
En aquel tiempo, en la España casposa y siniestra, cualquier individuo que rompiera moldes era considerado un loco y, a veces, un peligroso. Simplemente, dedicarse a indagar por su cuenta en ciencia y técnica ya era objeto de burla. Es cosa de brujas, recuerdo que decía una tía mía cuando le contábamos los intentos del hombre por traer imágenes de la televisión extranjera, pero próxima. No recuerdo el nombre del chalado, que era un genio tratando de hacer funcionar una televisión en su taller de electrónica, en la capital provinciana y tradicionalista navarra que no había pasado aún de la radio. Los chicos nos arremolinábamos como tontos pero expectantes curiosos, y él a lo suyo, nos dejaba estar sin inmutarse, y en medio de una maraña de rayas y sonidos extraños a veces aparecían imágenes. Cosa de brujería.
Aquel mediodía las imágenes misteriosas fueron las del Tour. Si fue entonces cuando Julio Jiménez, ciclista abulense, coronó el Puy de Dôme no lo recuerdo, ni sé si lo supe en ese momento. Hoy leo que casi a sus noventa años, Julito ha perecido por accidente, encima por accidente. No lo podré comentar con mi tío de Ávila, con el que tantas veces hablé sobre Jiménez, al que conocía porque en Ávila en aquellos tiempos se conocían hasta los gatos.
Pero hasta una muerte ajena puede traerle a uno recuerdos entrañables -ah, cómo nos persiguen los tiempos de niñez y juventud, tan poco entendidos entonces, tan echados en falta ahora- y nunca es tarde para ir más allá.
Comprender lo que fue nuestro pasado histórico, del que solo nos han contado anécdotas pero poco explicado lo que había detrás, de una densidad importante. Nada menos que la idiosincrasia de un país.
Fáckel:
ResponderEliminartras leer tu entrada, me viene a la cabeza lo mal que se trata en España a sus héroes. Ahora Nadal es el mejor. En cuanto deje el tenis y pasen un par de años, ya será pasado. Y así con todos. Ni te cuento si Nadal fuera francés, o norteamericano, o incluso inglés.
Salu2.
Bueno, no sé si es cuestión de héroes, soy escéptico desde hace mucho a este calificativo, tan manipulado. Lo que sí son ciertos individuos son verdaderos esforzados. Gente que trabaja su área, sea profesional del deporte o médico o enfermera...No te fíes mucho de cómo otros países agitan a sus "triunfadores" del momento. Hay mucho business detrás y muchos de ellos son flor de un día. En las películas norteamericanas salen muchos "héroes" que encumbraron ciertos sectores (entre estos la prensa) y luego los dejaron tirados. Lo que sí he leído hoy en una crónica sobre Julio Jiménez es que en una ocasión no ganó el Tour por el cainismo de sus compañeros. ¡Toma! ¿Cómo calificarlo?
EliminarUna marranada, una auténtica hijoputada. Si no gano yo, que no gane éste. Leí también hace poco los tejemanejes que llevaron políticos y escritores y "lograron" que ni Galdós ni otro escritor, que no recuerdo ahora, se llevaban el Nobel...
EliminarCainismo en estado puro y perdurable.
Salu2, Fáckel.
Sí, sí, en el mundo literario hay casos, no me he preocupado mucho de informarme, pero a veces lo he oído. ¿Y los negros? Me refiero a escribientes pagados para autores reconocidos. ¿Qué opinas? Me sé de alguno cercano que es muy citado mucho mucho y que parece que su última novela fue escrita por otro (u otra), no quiero decir más.
EliminarSe ha ido uno de los de los grandes del ciclismo. Un escalador nato. Según cuentan, "El relojero de Ávila" que logró en su carretera profesional entre 1959 y 1969 cinco victorias en el Tour de Francia, a las que se sumaron cuatro más en el Giro de Italia y otras tres en la Vuelta a España ha parado su reloj.
ResponderEliminarEl ciclismo era, entonces, un deporte muy seguido en el Norte. La radio y algunas imágenes, nos hicieron conocer a los valientes y esforzados.
En esos recuerdos del pasado histórico, y la juventud de ayer, había -y sigue habiendo- mucha vida y mucha niebla. Descanse en paz, uno de los precursores olvidados, pero siempre cercano al pueblo.
Un histórico, sí. Y aunque hubo muchos nombres de importancia en el ciclismo español (no te cuento en el francés o italiano, por ejemplo) Bahamontes y Jiménez fueron muy representativos en su tiempo. Pero también Timoner, Loroño, Poblet...Y recuerda sus rostros o su pose en bici que colocábamos en las chapas de los refrescos.
EliminarLa verdad que sí, poco se sabe de nuestro pasado, solo lo que nos cuentan y la memoria es selectiva y caprichosa con el paso de los años olvida y cambia cosas.
ResponderEliminarUn placer leerte, Fackel.
Un abrazo.
Pero podemos informarnos sobre el pasado, además del conocimiento que hemos acumulado por experiencia. Además entre lo que nos silenciaron y las mentiras que nos contaron para mí siempre ha sido un acicate el saber algo más.
EliminarHoy apenas he visto la tele, me he enterado de la muerte de Julio Jimenez "el relojero de Ávila" por ti, luego lo he seguido en la prensa digital, no era un niño, pero parece que se mantenía bien a sus más de 80 años. No lo conocí como ciclista salvo algún que otro video y las fechas que emiten el Tour o la Vuelta a España, yo empecé a seguir el ciclismo con Perico Delgado y después con Indurain, ahí me he quedado estancado. Solo queda decir que descanse en paz un deportista que vivió en unos malos tiempos.
ResponderEliminarSaludos
En mi infancia y juventud había una pasión enorme por el ciclismo y eso que entonces lo mediático y comercial no era abusivo como en tiempos de Induráin (otro de los grandes) o ahora. Era pasión aquello. El día que venía la Vuelta a mi ciudad nos daban vacación por la tarde para que pudiéramos ir a ver la llegada. Un compañero tenía tanta afición que estaba suscrito a Miroir-Sprint, una revista francesa de ciclismo. Nos daba una envidia, aquí no había nada igual.
EliminarUn escalador nato por lo que tengo entendido, ahí esta su currículum subiendo esos picos imposibles. No llegué a verlo nunca en acción pero si que escuché algunos de sus sabios comentarios en la Cadena Ser. La carretera y esos accidentes que podrían evitarse (en mi opinión, muy personal claro, deberíamos dejar de conducir -TODOS- a una edad razonable, desconozco quien iba al volante pero parece ser que eran tres los octogenarios que iban en el vehiculo siniestrado...).
ResponderEliminarTenía lógica la capacidad escaladora de Julito. En Ávila hay mucho donde ejercitar, con citar la Sierra de Gredos ya se dice bastante. pero hay otras sierras menores donde él entrenaba. Aunque no sea un tema vinculado al ciclismo te cuento que una de las obras que más me impresionaron siempre fue la calzada romana del Puerto del Pico, que conecta dos valles, nada menos que 1.400 metros de altitud. Imaginar a los obreros, cautivos seguramente, construyendo duramente aquella obra escalofría. Te paso un enlace interesante:
Eliminarhttp://ingenieria-civil.org/GOING/obra.php?id=126
Tu observación sobre dejar de conducir a edad provecta, me parece de buen tino. Lo razonable puede ser engañoso, autoengaño. Muchos creen que se valen y luego pasa lo que pasa. El reflejo no es el mismo, cualquier tirón, ir hablando y discutiendo, etc.
Una muerte un tanto ridícula, para uno de los grandes del ciclismo. Fue un primera figura, pero era tan discreto que no le daba mucha importancia a sus gestas.
ResponderEliminarEran unos tiempos en que cualquier logro deportivo en el extranjero era oxigeno para la dictadura.
En efecto, daban bombo y platillo a cualquier logro, y luego encima no agradecerían lo más mínimo al que realizaba el esfuerzo. Pero la gente tenía, teníamos, la necesidad de convocarnos en torno a este tipo de pasiones, aligeraban lo gris de las vidas.
EliminarUna leyenda Don Julio. Una muerte absurda, Fackel, me critican cuando digo que las personas de la tercera edad no deberían conducir, provocan accidentes o son ellos los accidentados, los reflejos dan de sí, el cuerpo no es el mismo para su sanación, están en desventaja.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, Verónica. Pero ya sabes lo prepotentes y confiados que son algunos ancianos...
EliminarUn precioso homenaje a un grande del ciclismo. Lo cuentas de un modo épico y se agradece.
ResponderEliminarPara mí el ciclismo tiene dos bellezas a la vez. Por una parte el esfuerzo deportivo. La estrategia y la táctica. El entrenamiento, la resistencia y la fuerza mental para aguantar todas las etapas de un Tour de Francia, de una Vuelta a España o de un Giro de Italia.
Por otra parte el ciclismo lo percibo como una alegoría de la vida. Las etapas, el trabajo en equipo, las escapadas en solitario...
Me parece un deporte que hace soñar...
A mí me parece de los deportes que más se salvan, aunque ahora todo es diferente. En otro tiempo era el esfuerzo y la coordinación, más relativa y ahora es más calculada y hasta estudiada . Pero tu observación descriptiva es muy acertada, sacas conclusiones éticas incluso. Aunque ya digo que hay mucha política de las direcciones de los equipos hoy día, con la marca publicitaria detrás metiendo presión.
EliminarA mí lo de Julito me ha traído tantos recuerdos...No solo de ciudades sino de personas y situaciones, ya ves. Gracias, Ana.
Hay profesiones que como el Miño se llevan la fama, mientras que otras son las que llevan el agua. Así el ciclismo, el atletismo, la gimnasia, el tenis o la natación son menos populares que el fútbol el baloncesto o incluso el rugbi. Quizá porque hay profesiones, me niego a llamar deporte a lo que es una profesión donde se cobra y vive de ello, quizá, digo, en que se han de entrenar muchas horas al día para llegar a tener unas marcas aceptables y donde no está permitido los deslices.
ResponderEliminarDEP.
¿Hay algún deporte profesional donde no se cobre?
EliminarOtro deporte que yo admiro es el de pelota en frontón. Jugué de joven en plan entretenimiento, aunque hoy no tendría cuerpo para aguantar el tirón.
Aguantemos el tirón cotidiano, hagamos lo que hagamos.
El deporte profesional está demasiado sobrevalorado. Hoy he sabido que Rafa Nadal, juega con un reloj cuyo precio se acerca al millón de euros. Podéis leer al respecto AQUI
ResponderEliminarMe parece un escándalo si pienso lo que se podría hacer con el valor de ese reloj.
La información viene a través de OkDiario, hum.
EliminarBueno, está bien tener dudas, pero hay que tratar de ser desapasionadamente objetivo (creo). Solo tienes que ir a la web del relojero y verás entre sus colecciones el modelo de Nadal del cual se han fabricado solo 50 piezas numeradas al precio de 900.000 euros.
Eliminarwww.richardmille.com/collections
Ya. Pero sigo teniendo dudas de cómo enfocar ciertos temas.
EliminarEse ya descansa. DEP
ResponderEliminarEs curiosa la expresión extendida. El descanso es propiedad de vivos. Se la aplicamos a los que ya no viven. Como si quisiéramos ir a un más allá que no es tal. Expresiones, que supongo vienen de antiguo.
EliminarAixò: "ah, cómo nos persiguen los tiempos de niñez y juventud, tan poco entendidos entonces, tan echados en falta ahora", em fa pensar en una tanka d'"El llibre de les cent tankes, que he descobert fa poc:
ResponderEliminarSi molt vivia,
¿enyoraré -em pregunto-
d'avui els dies?
Ara estimo les hores
en què el món doló'em dava.
Es bello el poema. ¿Se sabe del autor? Bona nit.
EliminarL'autor n'és Fujiwara No Kiyosuke, que va viure entre 1104 i 1177.
EliminarGracias, no sabía de este poeta.
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