"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





viernes, 19 de diciembre de 2014

Post scriptum: vericuetos













Por qué vericuetos tan extraños se conduce la vida, persuasiva Safo. El extranjero me trae un escrito anónimo que dice haber recibido. Como no entiende bien todas las palabras y menos todos sus sentidos quiere que se lo interprete. Se lo traduzco: "Oh, tú, extraño enviado del destino. Llegas para traer el aire de la tierra fértil sin pedirnos nada a cambio, salvo permitirte aprender en nuestros pedregales. Te es concedido. Si huyes de algún amor has llegado al lugar adecuado donde reponerte. Te es ofrecido. Si el mundo de tu origen se quedaba pequeño sé bienvenido para hacer crecer el nuestro. Te es exigido. Cede tu aire, toma el amor, amplía nuestro espacio. Participa de la libación en nuestra fiesta". Al acabar me dice con mirada franca aunque algo confusa: ahora sé, pues, que debo quedarme. Me pregunto, amiga, quién de nuestros íntimos desea atraerse al hombre nuevo con artimañas de un discurso tan retórico.




(Obra de Lawrence Alma-Tadema)
      

4 comentarios:

  1. Qué bellezas estás escribiendo, dios mío...

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    1. Ejercicios, redacciones, entretenimientos, ocurrencias...

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  2. Me voy muy satisfecha de lo que he leído.
    Fackel: Te deseo una Feliz Navidad, que pases una Nochebuena entrañable en la mejor compañía. Abrazo fuerte.

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    1. Gracias, Sara, por tu amabilidad. Feliz solsticio, feliz día a día. Lo profundo es el aire.

      Un abrazo.

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