La noche era ciega. Llovía a cántaros. Por el canalón roto vertía alocadamente el agua. Yo abría el balcón de par en par y ponía las manos para sentir la lluvia en estado puro. Mis padres me llamaban alarmados y me metían a la fuerza porque, tal como parecía escuchar que decían, estaba y no estaba allí.
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A lo mejor es que estabas siendo, y por eso (sic) la alarma...
ResponderEliminarQuién sabe...lo que sí intuyo es que era una manera de ser...y de estar. Gracias, Sofía.
EliminarEstar siendo es la única forma de VIVIR como ser humano completo. El 95% no sabe ( o no quiere) hacerlo.
EliminarPero quien más o quien menos, vive: por inercia, bajo otros parámetros, dejándose llevar...hay tantas formas, se compartan o no...
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