"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





miércoles, 1 de mayo de 2013

Las renuncias de Job
















La pérdida de los ideales es la puerta para hallar las verdades, repite como un estribillo recién descubierto. Los ideales eran dulces y se tenían a disposición. Las verdades son crueles y encima no se poseen. Hay otra diferencia silenciosa: que el tiempo ha renunciado a ponerse a su servicio.




(Imagen de Ralph Gibson)

2 comentarios:

  1. Ésa es una de las pérdidas más dolorosas, y se toma su tiempo. Parece silenciosa, pero escuchando atentamente puedes oír cómo trabaja, como la carcoma.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay, esa carcoma, aunque no se la oiga, se nota su tarea. Oídos sordos mejor.

      Eliminar