Una vez, ¿cuánto hace de ello?, escribí esto...
tu boca
¿está hecha de hielo
o de azahar?
si de hielo
mis labios se sumergirán
en busca de aguas profundas
y nítidas
si de flor
besaré un aroma
que me devuelva a la tierra
tu boca
oferente
pálpito
para mi sed
Hoy sigo sin saber si el hielo pudo con la flor, y no la dejó crecer. Y mi sed...ah mi sed. Permanece.
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ResponderEliminar“Y mi sed...ah mi sed. Permanece.”
ResponderEliminarEstimado Fackel, no me venga con mandangas, aquí todos tenemos sed. Trasvase NO.
En mi pueblo a esto lo llaman mezclar churras con merinas, Aragonía. Me deleito la tarde con Mariano José de Larra. Le invito.
ResponderEliminarBuen dominical.
¿Quién es la doncella de la foto, maese?
ResponderEliminarSi se puede preguntar...
Stalker, te contestaría con unos versos de Federico (García Lorca, otro que no nos merecemos):
ResponderEliminar"Ay, amor que se fue por el aire,
ay, amor que se fue y no vino"
Dejémoslo ahí.
No se fue. Dejó el páramo oscuro abandonado a la maleza, eso sí. Algún día cruzará la cancela y verá la hierba ocupar todas aquellas imágenes que poco a poco fue colgando en los muros.
ResponderEliminarY sí, la sed que nos gobierna, Fackel
Si usted lo cree y si usted lo dice , Anónimo...
ResponderEliminarFackel:
ResponderEliminaresta fotografía me obsesiona, tiro del hilo e imagino la historia que hay detrás. Inquietante y hermoso, es una mezcla de sensaciones. Quizá es el rostro velado y la indeterminación en cuanto a la década, hay algo fantasmagórico en ello...