"...Y es que en la noche hay siempre un fuego oculto". Claudio Rodríguez





martes, 18 de agosto de 2015

Dieciocho de agosto





Ay, los asesinos creyeron que al matar al poeta mataban a todos los poetas. Tal vez para asegurarse de ello acabaron con pastores, jornaleros, maestros, ferroviarios, mineros, albañiles, metalúrgicos, labradores, impresores, militares fieles...de los cuales también era carne y sangre la poesía. Ay, los asesinos.



2 comentarios:

  1. Una pregunta que me viene a la cabeza. Después de tantos años ¿ qué hemos aprendido ?

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    1. Hemos aprendido que no aprendemos, Miquel. Así de amargo.

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