Sigues corriendo tus particulares cien metros lisos, a zancada de haiku... excepcional serie, muy refrescante... ¿todos los haikus son tuyos? ¡Son muy buenos!
Y a riesgo de hacerte la puñeta, una vez más insisto, mira esta conferencia de Chantal Maillard sobre la creación poética, hazme caso, te hará feliz:
Estimado Hacker. Como ves, finalicé la serie (lo poco puede gustar, pero lo mucho agota seguro) Al principio -como casi todo lo que me da en escribir- empecé por inercia, pero luego me apeteció aplicar el estilo haiku a varias fotos que hice en Oporto hace dos semanas. Digamos que en lugar de hablar convencionalmente de Oporto, me parecía oportuno homenajear la ciudad que me sorprendió gratamente con haikus. Entiendo que esos haikus, independientemente de que merezcan la pena o no, eso es de libre decisión de cada cual, son herméticos en algunos mcasos más que en otros. Lo importante de cuando se visita una ciudad no es tanto hablar de ella -para eso ya están las guías ad hoc- como hablar de la relación de ti mismo con ella. Aunque se trate de un recorrido efímero e insuficiente. En los haikus encierro significantes y significados personales, y como éste es mi blog ésa es mi expresión. El que quiera saber optra cosa que siga buscando en internet. Supongo, por lo tanto, que si hubiera seguido exponiendo fotografías de la ciudad portuguesa -aún tengo algunas que deseo colgar por la belleza de lo que allí existe- hubiera seguido manteniendo el tono y el método del haiku. Después de todo, un viaje es sobre todo algo subjetivo, personal, un rayo que entra en ti y te subvierte. Otra cosa no merecía la pena.
"Yo he elegido ser un poeta troyano. Pertenezco decididamente a la facción de los perdedores: los perdedores, privados del derecho a dejar huella de su derrota, privados hasta del derecho a proclamarla. Ahora bien, acepto la derrota, no la rendición". Poeta palestino Mahmud Darwish.
EL PASEANTE VALLISOLETANO
DIÁLOGO DE MÁSCARAS DEL REINO DE OKU EN EL MUSEO AFRICANO DEL PALACIO DE SANTA CRUZ
TÚ, LA EVANESCENTE
El alma condenada. De Bernini a Bartolozzi
CHITÓN
El mar de Aral
LA SILLA DE K
TAKLAMAKÁN
DICHOS Y CONTRADICHOS
LA DAME AU CHIEN
EL INGENIOSO HIDALGO DON QUIJOTE DE LA MANCHA
"-¡Ay! -respondió Sancho llorando-. No se muera vuesa merced, señor mío, sino tome mi consejo, y viva muchos años; porque la mayor locura que puede hacer un hombre en esta vida es dejarse morir, sin más ni más, sin que nadie le mate, ni otras manos le acaben que las de la melancolía."
Sigues corriendo tus particulares cien metros lisos, a zancada de haiku... excepcional serie, muy refrescante... ¿todos los haikus son tuyos? ¡Son muy buenos!
ResponderEliminarY a riesgo de hacerte la puñeta, una vez más insisto, mira esta conferencia de Chantal Maillard sobre la creación poética, hazme caso, te hará feliz:
http://www.cccb.org/ca/arxiu_multimedia?idg=24196
¡Y gracias por lo de hermano! ¡Abrazos
Estimado Hacker. Como ves, finalicé la serie (lo poco puede gustar, pero lo mucho agota seguro)
ResponderEliminarAl principio -como casi todo lo que me da en escribir- empecé por inercia, pero luego me apeteció aplicar el estilo haiku a varias fotos que hice en Oporto hace dos semanas. Digamos que en lugar de hablar convencionalmente de Oporto, me parecía oportuno homenajear la ciudad que me sorprendió gratamente con haikus. Entiendo que esos haikus, independientemente de que merezcan la pena o no, eso es de libre decisión de cada cual, son herméticos en algunos mcasos más que en otros. Lo importante de cuando se visita una ciudad no es tanto hablar de ella -para eso ya están las guías ad hoc- como hablar de la relación de ti mismo con ella. Aunque se trate de un recorrido efímero e insuficiente. En los haikus encierro significantes y significados personales, y como éste es mi blog ésa es mi expresión. El que quiera saber optra cosa que siga buscando en internet. Supongo, por lo tanto, que si hubiera seguido exponiendo fotografías de la ciudad portuguesa -aún tengo algunas que deseo colgar por la belleza de lo que allí existe- hubiera seguido manteniendo el tono y el método del haiku. Después de todo, un viaje es sobre todo algo subjetivo, personal, un rayo que entra en ti y te subvierte. Otra cosa no merecía la pena.
Gracias por soportarme, ente paciente.
Totalmente de acuerdo, Fackel; me han gustado mucho y no me parecen nada herméticos...
ResponderEliminarComo siempre, una vez más te escaqueas de la sugerencia que te hago con la confe, pero ya me tienes acostumbrado, así que te lo paso por alto.
¡Abrazos!