La gran noticia del día es esperanzadora. en medio de tanta ruindad y conflicto entre humanos. Y proviene de la naturaleza inmensa que nos supera. Veo en ella esperanza porque está relacionada con el conocimiento. La confirmación de que las ondas gravitacionales, de las que se había hablado e investigado desde hace muchos años, existen. De ello comenta la prensa y la investigación astrofísica seguramente dará más pasos de gigante en nuestra aproximación al saber sobre el universo. Todo conocimiento es un paso positivo y más si se hace del mismo un uso constructivo en la historia humana. Casual y paradójicamente leía hoy también estos versos del poeta español del siglo XVII Gabriel Bocángel:
"Lo que pasó ya falta; lo futuro
aún no se vive; lo que está presente
no está, porque es su esencia el movimiento.
Lo que se ignora es sólo lo seguro.
Este mundo, república de viento,
que tiene por monarca un accidente."
Por monarca un accidente y por constitución un par de frases obvias, las leyes de la termodinámica. La elegancia está en la sencillez.
ResponderEliminarEl universo sigue su curso más allá de la esterilidad de nuestros dioses.
EliminarMagnifica noticia. Estoy deseando conocer las aplicaciones. Cuanto me gustaría ser apta para el lenguaje matemático, pero no cayó esa breva!
ResponderEliminarLo que pueda deducirse de esta larga investigación no lo conoceremos, pero ese es el eje a través del cual confío y espero.
EliminarEste hallazgo es extraordinario y de una enorme trascendencia. A mí lo que me deja entusiasmado es que aquello que se demostró matemáticamente ahora se comprueba empíricamente. La elegancia de la fórmula de la relatividad se disfruta una vez más. A lo largo de la historia de la ciencia esto ha ocurrido otras veces, la teoría por delante y después la comprobación, recuerdo la aceleración de Coriolis que dió significado a una constante de integración. Una maravilla, un monumento a la inteligencia.
ResponderEliminarCuanto más simple mayor concentración de ingenio y belleza. Cuanto más simple más bello.
Salud
Francesc Cornadó
Pero la teoría seria se basó en cada momento histórico en una observación lo más escrupulosa y rigurosa posible, con arreglo a los medios. Mientras unos perdían el tiempo consolidando sus ídolos y dioses interesadamente, otros guerreando y afianzando propiedades y territorios, otros arrastrándose por fangos, una minoría curiosa y escéptica indagaba. Aquel espíritu antiguo ha cundido siempre. Se han recogido muchos bienes de tal actitud y cada vez será más hermosa la compleja simplicidad de todo lo que forma el universo. Solo falta un nuevo salto de calidad en las relaciones de justicia y equidad de los humanos. ¿O escapan de la matemática y las demostraciones gravitacionales? No lo creo. Salud de tarde pluviosa.
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