Así sea, porque lo que abunda en nuestro entorno, y no te cuento en las altas instancias, es la hierba mala (que me perdone esta, puesto que hasta la hierba de verdad más despreciada o que parece fea tiene propiedades, de la mala hierba humana ya lo puedes ver...)
Vivimos en la tierra de promisión: promete los mismos fantasmas de los tiempos pasados. Triste. Ya que lo citas: ¡Viva Goya! no sé si nos lo merecemos los españoles. Pero ahí está: notario de la sociedad y de sus castas, de sus costumbres bárbaras y sus desdichas, y otros...Larra, Quevedo, Machado, Cadalso...etc.
Pin y Pon.
ResponderEliminarHuy...no estará usted haciendo apología del broccolismo o del acelguismo, ¿no?, ya sabe que está sumamente penado.
EliminarEl tiempo de los globos y la involución que bota y brota en mi tierra, Argentina.
ResponderEliminarVaya, ya veo que cunden las burbujas y las involuciones, Daniela. Vaya tiempos.
EliminarQue al amarillo rabioso sea el de Vincent. Y haya más girasoles y correspondencias!Es muss sein!
EliminarAsí sea, porque lo que abunda en nuestro entorno, y no te cuento en las altas instancias, es la hierba mala (que me perdone esta, puesto que hasta la hierba de verdad más despreciada o que parece fea tiene propiedades, de la mala hierba humana ya lo puedes ver...)
Eliminar¡Triste vida la del bufón! Goya se ganaría bien la vida como notario de la realidad.
ResponderEliminarVivimos en la tierra de promisión: promete los mismos fantasmas de los tiempos pasados. Triste. Ya que lo citas: ¡Viva Goya! no sé si nos lo merecemos los españoles. Pero ahí está: notario de la sociedad y de sus castas, de sus costumbres bárbaras y sus desdichas, y otros...Larra, Quevedo, Machado, Cadalso...etc.
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