miércoles, 14 de enero de 2015

Post scriptum: el mendigo















A la puerta del mercado acostumbra a sentarse un mendigo de edad incierta. No le doy nunca limosna, ni tampoco él la pide. Hablamos. Desea tener noticias de ultramar. Dice que todo llegó a esta isla desde lejanas tierras, como él mismo. Dice que ha tenido varios oficios, pero que en ninguno encontró razón de ser. Y que ahora, teniendo menos que nunca, se cree dueño de algo. ¿Qué posees si no eres más que un paria?, le replico. El tiempo, me contesta ufano. Pero el tiempo no te protege de las inclemencias del clima, ni te alimenta, ni te garantiza el respeto de la gente, ni te asegura la longevidad, le argumento por contradecirle. No duda en su respuesta : es el precio que debo pagar por disponer del tiempo en su vacío.

Safo: ¿no crees que no va descaminado el mendigo? ¿De qué disponemos nosotros, que abundamos en bienes y nos conjuramos para no dejar tiempos muertos en cada jornada? 



(Fotografía de Lee Jeffries)


16 comentarios:

  1. Depende Fackel, depende, y he visto de todo, hasta alucinar sin necesidad de química ni supuesta enfermedad mental alguna.

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    1. Yo conozco caso de alucinadores a través de la escritura, p.e., y sin enfermedad mental ni sobredosis externas de tarro.

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    2. Y hay otros p.e., M.J., en cuya descripción no voy a entrar, y ya sabes, a buena entendedora...

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  2. El tiempo es nuestro compañero (pitonisa dixit)

    Abrazo, fackel.

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    1. Y a veces nuestro enemigo, o nuestro traicionero, o ...Gracias.

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  3. "...de edad incierta". Es realmente difícil calcular la edad del mendigo perenne. De algún modo, está situado fuera de nuestra identitaria órbita temporal.

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    1. Hay estado de mendicidad latentes, universales, permanentes y cuasi eternos. Por los noticieros los vemos diariamente y algunos revisten su pontifical y todo.

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  4. Bendita libertad y riqueza la del mendigo.
    Abrazo anisado.

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    1. Bendita libertad la del libre que la siente, sin que los demás nos enteremos. Gracias Sara por ese saborizante.

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  5. es posible, abrazando una hipótesis, que el tuviese tiempo de ver la manzana caer y nosotros ocupados por los aparatos tecnológicos nos choquemos con el árbol
    el tiempo, da oportunidades mmjhhh, no sé
    saludos

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    1. De cualquier manera nuestro choque frontal tiene que ver también con la manzana que cae, el problema es que si sobrevivimos la reflexión la haremos en un trance de cuyo estado vaya vos a saber. Salud, hermano.

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  6. Vuelves a dar en el clavo con tus palabras. Precisamente ahora, que estoy viviendo un proceso personal, no sé si decir complicado, interesante, o qué, estas líneas vuelven a tocar el misterio de lo que somos, y en el que nos movemos, entre los sueños e ilusiones y las necesidades más básicas...Y ahí nos perdemos la maravilla de vivir fuera del tiempo...
    Me encanta leerte.
    Una sonrisa!
    Sonia

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    1. Es que quien más o quien menos hacemos análogas reflexiones sobre los significados y significantes de la vida. ¡Y de la vida en ésta! No en patrañas ni en mundos inexistentes. Gracias por tu acompañamiento. Ánimo en las busquedas siempre.

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  7. Todos los tiempos se rellenan, sean muertos o no. El problema es con qué rellenamos nuestro tiempo. Cada uno debería mirarse un poquito el ombligo y avergonzarse, o no.

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    1. Cierto que se ocupan, pero...algunos los rellenan de serrín o de humo. Pararse y vaciarse para sentirnos es otra cosa. Gracias, S.P.

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