domingo, 3 de febrero de 2008

Vindicación de lo curvo



Es un axioma geométrico, que algunos pretenden además moral, que la distancia más corta entre dos puntos es la línea recta. Pero ¿todos los puntos se sitúan para ser medidos? ¿Sólo lo recto permite llegar a llegar con satisfacción a uno de los puntos? Y ¿sólo se vive entre dos puntos? Este axioma toma como referencia una dimensión de la realidad. Pero la realidad ¿sólo se manifiesta en una dirección? ¿No es la vida un descubrimiento de dimensiones, tantas veces recónditas y misteriosas? Y además, ¿se trata de llegar antes? ¿Para beneficiarse uno mismo o para dar beneficios a otros? El lenguaje católico dispone la vida entre el punto alfa y el punto omega. Bien, pero asumiendo, y además sin dramas, que la vida se desarrolla tópicamente entre un comienzo y un final, ¿no es el transcurso de la misma un recorrido de sinuosidades, oblicuidades, transversalismos y tangencias varias? ¿Qué es lo recto, qué lo torcido? ¿Fue recto el origen? ¿Será recto el final? Qué obsesión tienen algunos por catalogar y traducir en metáforas tras las que ocultan ladinamente un querer regir la vida de los hombres. El pensamiento, ¿es recto? ¿Lo es el bullir de las ideas, el movimiento de las neuronas, la descarga de electricidad de la mente? La creación y el arte, ¿son rectos? ¿Y la investigación, la aventura del descubrimiento, la comprobación de las vidas que anidan dentro de otras vidas? ¿Dónde la rectitud de las bacterias, de los anticuerpos, de las defensas? ¿Lo es la aspiración, la experiencia, el deseo, la búsqueda de la satisfacción? ¿Lo son las risas, los suspiros, las muecas, las miradas, las caricias? ¿Son rectos los valles, las olas, las nubes, su contemplación? ¿Lo es el reposo, la calma, el diálogo, el viento?

Descubro un poema que viene al pelo y que me han dicho que fue escrito por un tal Jesús Lizano, y que ansío transmitirlo en el blog. Y se titula...


Las personas curvas


Mi madre decía: a mí me gustan
Las personas rectas.




A mí me gustan las personas curvas,
las ideas curvas,
los caminos curvos,
porque el mundo es curvo
y la tierra es curva
y el movimiento es curvo;
y me gustan las curvas
y los pechos curvos
y los culos curvos,
los sentimientos curvos;
la ebriedad: es curva;
las palabras curvas;
el amor es curvo;
¡el vientre es curvo!;
lo diverso es curvo.
Y la paciencia es curva.
El pan es curvo
y la metralla recta.
No me gustan las cosas rectas
ni la línea recta:
se pierden
todas las líneas rectas;
no me gusta la muerte porque es recta,
es la cosa más recta, lo escondido
detrás de las cosas rectas;
ni los maestros rectos
ni la maestras rectas:
a mi me gustan los maestros curvos,
las maestras curvas;
y los dioses curvos:
¡libérennos los dioses curvos de los dioses rectos!
El baño es curvo,
la verdad es curva,
yo no resisto las verdades rectas;
vivir es curvo,
la poesía es curva,
el corazón es curvo.
A mi me gustan las personas curvas
y huyo, es la peste, de las personas rectas.



(Fotografía de Nimoy y cuadro de Petrov-Vodkin)






3 comentarios:

  1. hace tiempo leí una obra de Juan Antonio Ramírez, catedrático de historia del Arte de la Complutense, sobre la relación entre la apicultura y al arquitectura.Es muy interesante, sobre todo la observación sobre la importancia de gestarse en un huevo( incluido el saco amniótico), que es redondo, y una celda hexagonal, y los paralelismos que se establecen en la arquitectura(casa-contenedor recto o curvo). No es para sintetizarlo en cuatro frases, pero confirma lo que tú expones y lo que siempre he intuido. Curva, siempre curva....
    http://www.elpais.com/articulo/cultura/imaginativo/ensayo/relaciona/abejas/arquitectura/elpepicul/19981209elpepicul_3/Tes

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  2. http://www.elpais.com/articulo/cultura/imaginativo/ensayo/relaciona/abejas/arquitectura/elpepicul/19981209elpepicul_3/Tes

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  3. Apartarse de la dirección recta por caminos curvos
    Fackel me ha encantado este poema

    buenas noches curvas;-)

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