miércoles, 20 de agosto de 2014

Parada














Te miras en el espejo un rato más de lo habitual. Ha llovido tanto desde entonces, reflexionas. Y sin embargo, te reconoces en lo esencial. Agradecido, sonríes lentamente. Agradecido, el espejo te devuelve la sonrisa. Con un rictus más irónico e incluso risueño, que tú agradeces.



12 comentarios:

  1. Creo que nunca llegaré a conocerme a fondo. Tengo salidas de las que después me arrepiento, y hago cosas de las que no tenía ni idea hubiera podido hacer cuando era un crío.Todo me intriga y a la vez todo me va importando menos.
    Si tuviera que juzgarme sería implacable, y sin embargo, no me da la gana sentarme en el banquillo.
    El espejo es el único aparato que convierte los monólogos en diálogos...pero a mi no me contesta.
    Salut

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    1. Estamos siempre en marcha, nosotros podemos ser nuestro mejor amigo o el más odioso; ¿el espejo? un mero testigo, a veces cómplice, con frecuencia un interlocutor.

      Salut.

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  2. Clarísimo. La vida reclama su parcela de felicidad. Enhorabuena.

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  3. Detrás está nuestra esencia, eso no cambia aunque hayan llovido tormentas, y la esencia siempre es risueña. Feliz día

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    1. Si bien a veces desconocida, o conocida a medias. Tal vez por eso mismo hay que seguir escuchándola desde lo más recóndito, ¿no? Gracias, Fedora.

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  4. Cada minúscula parada ante el espejo nos refleja lo ‘fonda’ que puede llegar a ser la existencia… y lo caprichosos que pueden llegar a ser los genes humanos, ¿no?

    Salut.-

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    1. Absolutamente de acuerdo. Por mucho que ajustemos nuestras agendas seguimos estando a merced de lo imprevisto, ignoto o simplemente caprichoso. Salut siempre.

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  5. aunque se niegue, siempre hay una razón para sonreír frente al espejo,
    algunas veces. socarronamente
    saludos

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    1. El mero hecho de mirarnos es ya un guiño irónico, aunque tengamos un mal día. Pero hay que seguir celebrando los días del vivir, ¿no te parece?

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  6. Esa parada ante el espejo tal vez sea la única posibilidad que tenemos de intentar desentrañar el misterio del paso del tiempo por nosotros pero a la vez de celebrar frente a él el hecho (para algunos hasta milagroso) de que a pesar de todo, seguimos vivos.

    Saludos.

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    1. Mucha gente suele decir cuando cumple años: ah, ay, un año más...Pero, ¿por qué no enfocarlo de manera opuesta? ¡Qué maravilla poder constatar que uno ha llegado a X años! No, no utilicemos el espejo de excusa, incluso podemos engañarle, que no es engañarle, vaya. Ponemos la sonrisa opuesta al estado de ánimo, ¿y qué? El vidrio es inmóvil; nosotros no.

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