sábado, 7 de junio de 2014

Imaginario, 81.




Hombres que hablan de dioses ocupan las plazas de la ciudad y ordenan levantar más templos. Se quedan solos, y agraviados por no dar satisfacción a sus quimeras se alejan, siendo devorados por las sombras.



2 comentarios:

  1. Siempre habrá dioses, Fackel, como bien sabes... mientras queden hombres que los adoren.

    Un abrazo

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    1. Pues hay tantos adoradores...que no van a caber los dioses, sospecho.

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